Por motivos espirituales o de reconciliación, fieles católicos asisten a la Catedral de la Ciudad de México a la imposición de ceniza, celebración con la que inicia la Cuaresma de acuerdo a los principios de esa religión.
Francisco Espinosa, de 70 años, compartió que esta celebración representa para él una época de meditación y de perdón para mejorar las cosas. Afirmó que siente que la participación en estas ceremonias “ha estado disminuyendo”, y subrayó que asiste a a esta consagración desde que era niño, es decir lo ha hecho durante 60 años.
El creyente confesó que aprovechó su visita al centro para entrar a la Catedral y ser partícipe de la misa, ya que como católico tiene como regla asistir en el Miércoles de Ceniza , el cual, afirma, es un motivo de reencuentro.
Fani, de 65 años y Aida Casanova de 70 años, quienes asistieron por primera vez a misa en la capital del país, comentaron que vienen de desde Colombia a México como turistas . Explicaron que esta celebración es un festejo donde Dios las protege.
También, comentaron que otro motivo de acudir al referido recinto religioso, es para ver a la “santísima virgen”. Opinaron que estas tradiciones no se han perdido, principalmente entre los católicos, puesto que comentaron que para ellos estos festejos los tienen presentes todo el tiempo.
Ellas aseguran que el miércoles de ceniza representa para los católicos un símbolo de fe que “es para sentirnos renovado”.
Lilia, de 60 años, quien permaneció sentada al término de la ceremonia eucarística, comentó que esta celebración representa la confirmación de su fe en Dios, y de su cristiandad. La devota dijo que asistió sola a la celebración, aunque explicó que su familia también es religiosa.
“Sí, andan por ahí, pero cada quien anda en su proceso de fe”. Lilia comentó que en esta ocasión vio poca gente por la hora del día en la que se impartió la misa, pero cree que no importa y opina que el Miércoles de Ceniza sigue “fuerte”.