En México el sistema de justicia es el problema más delicado que se relaciona con la impunidad, concluyeron académicos de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), según los resultados del Índice Global de Impunidad (IGI) presentado ayer.

Juan Antonio Le Clercq Ortega, coordinador del IGI y académico de la UDLAP, explicó que el promedio de impunidad global es de 39.99% y México tiene 49.67%.

Al igual que en 2017, cuando también se estudiaron 69 países, México se coloca en el grupo de los 10 con mayores índices de impunidad, a pesar de que en 2017 ocupó el puesto 65 y este año ocupa el 60.

“Si bien, aparentemente es una mejora, lo cierto es que hay que tomarlo con mucho cuidado porque no refleja cambios sustantivos en el caso del desarrollo de instituciones y capacidades, simplemente refleja cambios en la posición de otros países”, comentó Le Clercq Ortega.

“El caso de México no es el peor de América Latina en este momento, pero dado su tamaño, su capacidad económica, la magnitud de su población y las capacidades que tendríamos que tener después de muchos años de implementar reformas al sistema de justicia, de tener una reforma muy ambiciosa en materia de derechos humanos, es inadmisible que México se ubique en una posición tan alta en América Latina y se coloque entre los 10 países con mayor impunidad del índice”, indicó.

El rector de la UDLAP, Luis Ernesto Derbez, explicó que el índice no presenta información estadística del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, por lo que los datos reportados pertenecen al periodo del expresidente Enrique Peña Nieto.

Explicó que, según los resultados del IGI, existe una tendencia a vincular cárcel con justicia sin que necesariamente sea así.

“Observamos con preocupación que parece que hay una tendencia, tanto a nivel federal como estatal, de ser punitivos, meter más gente a la cárcel, crear muchas más ideas y leyes, reducir las posibilidades de que el sistema de justicia opere poniendo una serie de condicionantes y leyes que nos llevan a ser mucho más punitivos”, agregó.

“Ese no es el camino para mejorar ni las capacidades ni el funcionamiento del sistema de seguridad y justicia, y, por lo tanto, para acabar con la impunidad”.

Por otro lado, Luis Ernesto Derbez afirmó que utilizar evidencia de actos de corrupción como filtraciones mediáticas y no como elementos para procesar legalmente estos ilícitos únicamente ayuda a la impunidad, pero no habrá justicia

Así lo dijo en la presentación del IGI el rector de la casa de estudios al ser cuestionado sobre el impacto de los supuestos sobornos a exfuncionarios.

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