El vocero de la presidencia, Jesús Ramírez Cuevas , consideró que el actual mercado eléctrico en México es un modelo depredador, que despoja a las comunidades de sus tierras y territorios y genera una relación muy desigual con respecto al presupuesto público, pues ahí se entregan privilegios económicos y contratos en los que pierden la Comisión Federal de Electricidad ( CFE ) y el erario público.
En entrevista en la Cámara de Diputados, donde acudió a la instalación de la coordinación temática de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ramírez Cuevas dijo que esos privilegios económicos son parte de las ganancias que se les otorga, por lo que adelantó que con la reforma presidencial se va a terminar la ilegalidad de tener 77 mil 767 socios de a dólar.
El funcionario federal dijo que espera que haya un debate nacional en torno de por qué debe haber esta reforma eléctrica , que los mexicanos sepan cómo funciona, cómo le llega la electricidad a su casa, el costo que esto tiene y cómo hay un modelo que lleva a que haya algunas empresas que pagan muy poca luz, mucho menos de lo que paga un hogar mexicano.
“Esa desigualdad o esa injusticia, pues, queremos cambiarla y tener un sistema eléctrico que funcione a partir de lo que es el interés público y del interés de la colectividad sin acabar con el mercado, permitiendo que siga habiendo negocios, pero con ganancias razonables y con una forma de distribución y de generación que respete la vida de los pueblos, respete la naturaleza y al mismo tiempo también el presupuesto público y la lógica de la soberanía energética”, dijo.
Dijo que es necesario que se discuta y se apruebe, pero es más importante que se haga con conciencia, que no se imponga nada y que sean los ciudadanos los que sean testigos de cuál es el voto que van a tener sus diputados.
“Es más importante que esté informada la sociedad de qué se va a votar y por qué se va a votar, porque es crucial lo que está detrás del debate, que es qué tipo de sociedad tenemos, qué tipo de servicios debe ofrecer el Estado y cuál en este juego de la energía, que es un factor muy importante para el desarrollo y la producción, que debe ser accesible para todos a precios justos y en un modelo donde todos ganen, no solamente unos cuantos como ahora está establecido a partir de la reforma de 2013”, agregó.
Consideró que al aprobarse la reforma presidencial se van a respetar las inversiones, las plantas de generación existentes, y no solo se va a impulsar la generación que tienen pequeños hogares, comercios, restaurantes que tienen, por ejemplo, energía fotovoltaica, no solo se va a respetar, se va a promover que existan más.
“Creo que la existencia misma de la CFE, desde su inicio, da pie de por qué debe haber un organismo público encargado de la electricidad. Cuando se creó CFE, no sé, en 1960, solo el 40% del territorio, de la población, estaba, tenía el derecho a la electricidad o gozaba de este servicio. Tuvo que crearse esta empresa, fortalecerse y nacionalizarse la electricidad porque las empresas encargadas de su generación y distribución pues solo estaban pensando en el negocio y se concentraban en las ciudades”, asentó.
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