El PRI en la Comisión Permanente afirmó que el gobierno federal ordenó la puesta en marcha en estas fechas de la Nueva Normalidad, con la fase más alta de contagios y muertes, "con la finalidad evidente de lavarse las manos de las consecuencias de la crisis sanitaria y dejar en manos de los gobernadores la toma de decisiones difíciles".
Por conducto del senador Manuel Añorve Baños , vicecoordinador senatorial del grupo, en su participación en la sesión a distancia de la Comisión Permanente, los priistas reprobaron la aplicación de la nueva normalidad, que forma parte de una serie de contradicciones que propician la confusión de la gente en el país.
"Hoy se cuenta con más de 10 mil mexicanas y mexicanos que han perdido la vida, pero se estima que en realidad son más de 30 mil, y la curva no está cerca de aplanarse", dijo el senador Añorve Baños, y preguntó: "¿Por qué no se contabilizan los fallecimientos en clínicas privadas y por qué querer maquillar las cifras y engañar a la gente?".
Previno que México pudiera registrar rebrotes de contagios altos de SARS-CoV-2, dado que se han tenido que volver a aplicarse medidas distanciamiento, para evitar infecciones en países que empezaron la reapertura bien organizados, con números a baja, como es el caso de Alemania, Irán, China, Corea del Sur, Líbano y Arabia Saudita.
"Si el Covid está lejos de ser controlado y la curva aún más lejos de ser aplanada, es una irresponsabilidad que podría costarnos muchas vidas hablar de una nueva normalidad sin estrategia, ni visión", acusó Añorve en su turno del debate en la sesión a distancia, tercera que en esa modalidad celebra la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
Indicó que "la UNAM pide dos semanas más de confinamiento voluntario, ¿pero qué va a saber de epidemias y cuidados de la salud, la máxima casa de estudios del país, ¿verdad?".
E ironizó: "Es evidente que sabe más un solo hombre, Hugo López-Gatell, que toda la comunidad científica de este país".
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