Desde antes de que el coronavirus llegara a México, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell , pronosticó diferentes escenarios ante la pandemia . Afirmó que sería menos letal que la influenza y que México estaba preparado para hacerle frente, pero conforme avanzó la epidemia esos pronósticos variaron: desde la cifra de muertes y de contagios, hasta las fechas en que ocurriría el primer pico epidémico.
En las primeras conferencias vespertinas en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el funcionario hizo la primera proyección sobre el número de contagios y defunciones, que sería de 275 mil casos y 12 mil 500 fallecimientos. Con la epidemia activa, previamente al primer pico, el 4 de mayo, estimó que el 6 de dicho mes sería el primer pico y que las defunciones correspondían a las proyecciones; sin embargo, comenzó a enfatizar que estos números se cumplirían si y sólo si la sociedad obedecía las medidas de sana distancia .
“El pico máximo será el 6 de mayo y la estimación de mortalidad sigue siendo la que hemos proyectado. Ahorita tenemos 2 mil 271 personas que han perdido la vida por Covid y estamos cerca del punto medio de la curva epidémica. En el descenso de la curva podemos tener las otras más o menos 2 mil o 3 mil, y con ello ya tendríamos casi 6 mil o 5 mil 271, si lo ponemos nada más así, simplemente agregando 3 mil más”, dijo.
También lee:
Pero la cifra de defunciones no paró ni las estimaciones del subsecretario: el 4 de junio, durante la conferencia nocturna explicó que en un principio se estimaban tres cifras: 6 mil muertos, 8 mil y 12 mil 500. “Lo presentamos en una conferencia de prensa el 27 de febrero. Teníamos esos datos y hasta 28 mil, que se redondea a los 30 mil. No descartamos un intervalo de hasta 30 mil o 35 mil, es el intervalo plausible de lo que podemos encontrar, e incluso un escenario catastrófico de 60 mil fallecidos”.
A un año de que inició la pandemia, el escenario catastrófico se triplicó. El matemático Arturo Erdely dijo que estas fallas se deben a una mala interpretación de modelos matemáticos y que las proyecciones son para pronosticar, no para hacer promesas.