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Los aspirantes a comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) consideraron que el organismo debe defender su autonomía para que la transparencia y la rendición de cuentas sigan siendo un mecanismo de control ante el poder público.
Al entrevistarse ante las comisiones unidas de Anticorrupción, Transparencia y Participación Ciudadana, y de Justicia del Senado, coincidieron en que el Inai debe trabajar de la mano con el Sistema Nacional Anticorrupción para que haya un entramado de organismos autónomos en la lucha contra la corrupción.
El Senado deberá seleccionar a un aspirante de los 29 que fueron elegidos, aunque dos no acudieron a la cita, como es el caso de Néstor García Aguilar, quien mediante un oficio anunció que se retiraba del proceso, y Gustavo Rodríguez Robles, quien no llegó al encuentro, por lo que la lista se redujo a 27.
De acuerdo con algunos integrantes de las comisiones, la oposición conformada por el PAN, PRD, PRI y MC va porque el candidato que ocupe la vacante que dejó el fallecido comisionado Carlos Alberto Bonnin Erales sea totalmente independiente y no corresponda a cuotas partidistas, aun cuando algunos de los participantes simpaticen con alguno de éstos, o bien con Morena.
El exconsejero presidente del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), Javier Santiago Castillo, propuso que al ser el Inai una institución autónoma del Estado debe replantear los tiempos establecidos en la legislación para hacer más expeditas las resoluciones, ayudar a la construcción de un gobierno abierto, al señalar y sancionar “sin filias ni fobias, ni temor” las deficiencias de los sujetos obligados.
“Considero necesario que el Inai lleve a cabo una cuidadosa reingeniería organizacional y presupuestal, para eliminar duplicidades, actualizar el catálogo de cargos y puestos, implementar el servicio profesional, porque su estatuto fue promulgado el 2 de julio de 2013, y hacer un ejercicio más eficiente del gasto. Es de vital importancia consolidar el uso de la tecnología para ser más eficientes”, precisó.
El comisionado del Instituto de Transparencia e Información Pública de Jalisco (Itei), Salvador Romero Espinosa, externó que de quedar como el sucesor de Bonnin defenderá al Inai de los ataques políticos, y destacó que gracias al instituto se ha logrado conocer más casos de corrupción, por lo que, dijo, desaparecerlo implicaría un retroceso: “Si llegáramos a limitar al Inai, desaparecerlo o partirlo en dos, sería un gran retroceso en nuestra democracia y regresaríamos a aquella época en la que había pocos casos de corrupción, porque pocos se conocían”.
El especialista en derechos humanos Daniel Balboa Verduzco aseguró que es necesario acotar la estructura orgánica del Inai, así como realizar modificaciones que permitan contar con apertura gubernamental hacia la ciudadanía.
Rechazó tener conflicto de intereses, a pesar de que es parte de la estructura del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud: “Yo no soy trabajador de base y no tengo injerencia, y tan es así que he participado en algunos grupos parlamentarios como asesor”, detalló.
Elsa Bibiana Peralta, comisionada del Instituto de Acceso a la Información Pública y de Datos Personales de la Ciudad de México, dijo que se debe llevar a cabo una revisión en la capacitación para saber sobre el acceso a la información, difundir más el trabajo del Inai y su acercamiento a la sociedad.
Peralta fue cuestionada sobre el amparo que presentó ante el Juzgado Segundo de Distrito para evitar ser removida y que sea respetada su permanencia, que concluye hasta 2020, a lo que reviró que lo hizo por un tema de género y porque los transitorios señalaban que podía continuar con su cargo, “pues no me estaban separando del cargo y por la temporalidad”.
Hoy continuarán las entrevistas de los candidatos a ocupar el cargo de comisionado del Inai el Senado.
