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Mario Delgado, aspirante a dirigir Morena, advirtió que se han tomado decisiones desafortunadas que han agudizado “el problemón” en ese partido, por lo que llamó a sus contrincantes, Yeidckol Polevnsky y Bertha Luján, quienes presiden los dos máximos órganos del instituto político, a rectificar y reconducir el proceso interno de elección de dirigentes.
“Deben cumplirse los principios de no mentir, no robar y no traicionar y creo que se han tomado decisiones desafortunadas que han llevado a esta crisis”, dijo.
Delgado vio “medio raro” lo ocurrido el domingo, cuando dos instancias de Morena convocaron a dos congresos y llamó a actuar responsablemente, “no se vale hacer un proceso en el que el ganador diga: ‘Haiga sido como haiga sido’”.
El domingo pasado, Polevnsky Gurwitz a la cabeza del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido, emitió una convocatoria a un Congreso Nacional el 17 de noviembre, con el fin de reformar el estatuto para incluir la encuesta como método electivo de dirigentes; con eso se prorrogará su mandato hasta que se elija la nueva dirigencia morenista.
El mismo día, Bertha Luján y el consejo nacional que preside convocó a otro congreso el 24 de este mes para que éste designe a un nuevo CEN interino —que ya no encabece Polevnsky— y que conduzca a la reposición del proceso de elección de nuevos liderazgos, como lo ordenó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), al anular el proceso el pasado 30 de octubre.
Ambas convocatorias, anunció ayer el cuarto aspirante, Alejandro Rojas Díaz Durán, serán impugnadas por ilegales y aseguró que ninguno de los dos congresos citados resolverán la crisis interna.
Esto porque, recordó, tanto una reforma estatutaria como el nombramiento de una dirigencia interina son acuerdos que deberán pasar el tamiz de legalidad que es facultad del Instituto Nacional Electoral (INE).
Y ese proceso llevará al menos tres meses después de que se le notifiquen las decisiones, con lo cual se rebasarán 90 días que ordenó el TEPJF como plazo para reponer el proceso de sucesión en la dirigencia de Morena.
Acusó a ambas contrincantes de “agarrarse a congresazos”, con lo que llevan a Morena “al despeñadero”.
Rojas reclamó que es tiempo de que la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena convoque a los aspirantes al liderazgo a un acuerdo de conciliación que detenga “la degradación”.
En tanto, ayer comenzó a analizarse de forma preliminar por dicha comisión la queja interpuesta por la militante Griselda Rojano en contra de Polevnsky Gurwitz.
