Dentro de nosotros existe vida, se trata de una comunidad de microorganismos conocida como microbiota (virus, bacterias y hongos) que habita en la piel, boca y órganos como los intestinos, entre otros.

La microbiota se compone de microrganismos buenos y malos, que conviven sin provocar daños, pero, al romperse el equilibrio y existir más microorganismos malos que buenos nos enfermarnos. En las últimas décadas investigaciones científicas han reconocido su impacto sobre nuestra salud, ya que son “nuestros inquilinos” que se desarrollan según las condiciones que encuentran en nuestro cuerpo (genética, temperatura, enfermedades, estilo de vida que incluye descanso, ejercicio y alimentación).

Lactobacillus Casei Shirota y Microbiota intestinal Aliados para fortalecer nuestro sistema inmunológico
Lactobacillus Casei Shirota y Microbiota intestinal Aliados para fortalecer nuestro sistema inmunológico

¿Por qué es importante la microbiota intestinal?

Porque desempeña funciones esenciales en el cuerpo.

  1. Produce vitaminas: B y K
  2. Genera sustancias indispensables para el mismo intestino y algunas como neurotransmisores importantes para nuestro cerebro
  3. Su actividad metabólica, ya que interfiere en metabolizar lo que comemos
  4. Influye en nuestro sistema endocrino (producción de hormonas)
  5. Tiene una importante participación en el sistema inmunológico de nuestros intestinos
Lactobacillus Casei Shirota y Microbiota intestinal Aliados para fortalecer nuestro sistema inmunológico
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Además, la mayor parte de la microbiota de nuestro cuerpo se aloja en los intestinos y está en coordinación con más de la mitad del sistema inmunológico que se encuentra ahí mismo, por ello… lograr una microbiota intestinal sana en las personas, se ha convertido en un tema de interés médico, por su implicación en la salud y el sistema de defensas.

La colonización de la microbiota empieza desde que nacemos y cambia a lo largo de la vida, existen algunos factores que no dependen de nosotros, pero, la mayoría sí, como las condiciones de vida y nuestra alimentación.

Diversas investigaciones científicas demuestran que, personas con enfermedades intestinales, sobrepeso, obesidad, diabetes, psiquiátricas, inmunológicas, entre otras, tienen una microbiota intestinal alterada, es decir más bacterias malas que buenas y su diversidad es limitada (pocas especies).

¿Cómo tener una microbiota intestinal sana?

Mediante un estilo de vida saludable que incluye una alimentación correcta e integrando alimentos funcionales como prebióticos y probióticos, de éstos últimos, tienen reconocimiento científico los productos con Lactobacillus casei Shirota , consumirlos diario favorece el crecimiento de bacterias buenas que formarán parte de una microbiota intestinal sana que contribuirá a producir y estimular, Inmunoglobulina A ( importante en la primera línea de defensa) linfocitos T y células Natural Killer (NK) del sistema inmunológico que se encuentra en los intestinos.

El fascinante estudio de la microbiota intestinal y probióticos es tema de congresos internacionales en varios países que reúnen a científicos que exponen sus investigaciones para ayudar a los avances médicos.

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