El Senador Belisario Domínguez fue un defensor de la libertad y opositor del régimen de Victoriano Huerta, tras su discurso pronunciado en la Cámara de Senadores el 23 de septiembre de 1913, en la que llamó a los Senadores y al pueblo de México a levantarse contra Victoriano Huerta y por el cuál fue asesinado el 7 de octubre del mismo año.
En su honor se entrega la Medalla Belisario Domínguez, que es el galardón más alto que otorga el Senado de la República a hombres y mujeres mexicanos que se hayan distinguido por su ciencia o su virtud en grado eminente, como servidores de nuestra Patria o de la humanidad.
La Casona de Xicoténcatl es desde 2009 la sede para la entrega de la Medalla, y desde su creación en 1954 ha sido entregada a nueve mujeres, tres de ellas en el sexenio actual: Rosario Ibarra de Piedra en 2019, la Senadora Ifigenia Martínez Hernández en 2021 y el pasado 19 de abril se entregó la Medalla correspondiente al año 2022 a la escritora y periodista Elena Poniatowska Amor.
Hélène Elizabeth Poniatowska Amor nacida en París en 1932 en una familia formada por el último descendiente del Rey de Polonia llegó a México a la edad de 10 años, junto a su madre doña Paula Amor y su hermana Kitzya; aquella niña de origen aristocrático que llegó sin hablar español crecería para definir el papel de la mujer en el mundo cultural de México.
Elena Poniatowska se considera a sí misma como “más mexicana que el mole” se metió en el mundo del periodismo que era dominado por hombres que veían con recelo su trabajo, como reportera pudo conocer la realidad del país que se convirtió en su patria.
Utilizó su pasión por escribir para levantar la voz ante injusticias y se comprometió con causas justas, su lucha hizo una brecha en favor del feminismo en México, su obra forma un testimonio amplio y completo que nos permiten entender los variados contextos históricos de las últimas cinco décadas.
Elenita, al igual que don Belisario Domínguez, logró hacer del poder de las palabras su mejor arma; ambos entendieron el valor de la denuncia como un deber para detener las injusticias y los atropellos de los poderosos.
En su discurso, nuestra galardonada se refirió a su vida y su obra, a su historia con las letras y las historias que forjaron su mexicanidad, agradeció a las Senadoras y los Senadores, a su familia, a sus amigos, a México el país que le dio un hogar y a la vida que le permitió escribir lo que piensa.
En el Senado de la República nos sentimos honrados de haber otorgado la Medalla de Honor Belisario Domínguez a la gran Elena Poniatowska, presea que reconoce la importancia de su trabajo para nuestro país, para la cultura y el periodismo. Las y los Senadores continuaremos reconociendo la labor de los hombres y mujeres que alzan la voz para defender los derechos en nuestro país.
Senador