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Luego de las vacaciones de Semana Santa, en algunos kioscos de pruebas Covid ubicados en la Ciudad de México, como el instalado en la sede de la alcaldía Venustiano Carranza, se ha incrementado la afluencia de personas en 30%, de acuerdo con sus encargados.
Aquí, desde las ocho de la mañana ya se alcanza a ver la fila de al menos 60 personas, que a lo largo de la jornada va decreciendo, pero sin que dejen de acudir personas hasta que se acaben los exámenes que tienen reservados para el día.
En este kiosco, según menciona Miguel Barba, quien pertenece a la institución de participación ciudadana de la Secretaría de Inclusión y Bienestar de la Ciudad de México, al menos desde el miércoles pasado se han incrementado las pruebas, ya que antes de Semana Santa hacían alrededor de 90 pruebas diarias y después de las vacaciones subieron a 110 o 120.
El director del Centro de Salud Luis E. Ruiz, de la jurisdicción sanitaria de Venustiano Carranza, Néstor Galicia Noera, quien es encargado del kiosco, menciona que hasta ahora no hay un alza significativa en las pruebas ni en los casos positivos en la alcaldía, pero esperan un incremento la próxima semana.
“En estos días no ha habido un aumento significativo en pruebas, ni en positivos, por ejemplo, hoy se realizaron 110 tests y sólo hubo cuatro casos positivos. Se espera que para la próxima semana sí haya más demanda de pruebas, no sabemos si lo habrá de casos positivos, pero por lo menos sí vendrá más gente a hacerse la prueba, ya sea por precaución o por síntomas”, explica.
Galicia Noera refiere que en estos meses sí ha habido una baja muy significativa en las pruebas y casos en comparación con la segunda ola de Covid: “En enero y diciembre realizábamos alrededor de 300 pruebas diariamente, de esas, por lo menos 70 personas salían positivas al día”.
Una de las personas que dio positivo en diciembre fue Sofía, quien acudió al kiosco a hacerse la prueba, sin éxito, pues ya se habían terminado las de la jornada. Dice que en diciembre dio positivo a Covid-19 siendo asintomática; sin embargo, en ese mes perecieron tres familiares.
“Yo ya tuve Covid, fue en diciembre, por suerte fui asintomática, aunque en esa fecha fallecieron tres de mis familiares, dos de mis tíos y un primo. Hoy vine porque tengo malestar en la garganta, yo no salí de vacaciones, es por el malestar y me mandaron del trabajo para descartar el virus”, relata.
Quien sí pudo realizarse la prueba fue Tere. Ella dice que acudió por tener síntomas como gripa, cuerpo cortado y dolor de garganta. Explica que no salió en la temporada vacacional, pero por experiencia de muchas personas con Covid-19, se puede contagiar por medio de un familiar.
“Yo no salí en las vacaciones de Semana Santa para no arriesgarme, pero luego no es necesario porque en mi familia hemos sabido de casos de personas que no salen a ningún lado y un familiar es quien los contagia, los que les llaman asintomáticos, así que uno ya no sabe ni cómo protegerse”, platica.
Así, con la suerte echada de los vacacionistas y un ligero aumento en las pruebas, en los kioscos Covid esperan no vivir la tercera ola Covid.
