El canciller Marcelo Ebrard compartió en redes sociales su postura del informe preliminar sobre las causas del accidente de la Línea 12 del Metro ocurrido el pasado 3 de mayo y que provocó 26 fallecidos y en donde aluden fallas en la construcción.
En el documento destaca que para esclarecer las causas del accidente se necesita, además de un informe técnico final, “una indagatoria que revise todo el proceso de toma de decisiones en el diseño, trazo, supervisión y mantenimiento de la obra, así como los numerosos informes que la han revisado en los últimos años”.
Horas después de que la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum , presentara dicho informe, donde se señala que una falla estructural asociada a cuando menos seis deficiencias en el proceso constructivo causó el desplome de una trabe en la interestación Tezonco-Oivos de la Línea 12 del Metro, Ebrard, quien durante su gestión promovió y entregó dicha obra, insistió en que la indagatoria debe abarcar también el mantenimiento.
En una carta publicada en sus redes sociales expone que conocer las causas del accidente es un acto necesario para brindar justicia a las víctimas de la tragedia, pero también para lograr la reapertura, a la brevedad, de una línea que facilita la vida a cientos de miles de capitalinos y mexiquenses todos los días.
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Dijo que permanecerá atento a los avances de la investigación de Det Norske Veritas (DNV), particularmente a las respuestas a las líneas de investigación planteadas en las cuatro preguntas al final del informe dado a conocer hoy, y sobre las cuales se indagará en los próximos meses.
Con respecto al dictamen preliminar, presentado hoy por peritos de la empresa DNV, comisionados por autoridades de la Ciudad de México para indagar las causas del accidente, expuso que al “igual que el Presidente de la República, el Gobierno de la CDMX y los habitantes de la ciudad, respaldo la realización de las indagatorias periciales y técnicas que sean necesarias para determinar las causas del accidente y deslindar las responsabilidades a las que haya lugar.
“Durante la administración a mi cargo, promoví la construcción de la Línea 12 del Metro, como una obra con visión social, cuyo propósito fue dotar a cientos de miles de habitantes de la zona Suroriente del Valle de México, de un medio de transporte moderno, rápido y económico, hacia el centro y poniente de la ciudad, lo que se volvió una realidad durante los años subsecuentes”.
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Ebrard dijo que afin de gestionar la edificación de una obra de una manera eficiente, transparente y pública, adoptó los que, a su juicio y desde el ámbito de su competencia, eran los pasos adecuados a seguir, por lo que realizó una consulta ciudadana sobre conveniencia de construcción y destino de la Línea; lanzó una licitación pública internacional, de la cual resultó ganador un consorcio constructor integrado por dos empresas mexicanas y una francesa (ICA-Carso-Alstom).
“Constituimos una entidad pública desconcentrada con autonomía de gestión, “Proyecto Metro”, del que formaban parte más de 300 ingenieros, así como instalaron comités y subcomités de funcionarios, expertos e ingenieros , así como el acompañamiento de la UNAM, el IPN y otros colegios para la toma y aprobación de decisiones de índole técnico, presentadas por el consorcio constructor”.
Entre ellas, aseguró, destacan las relativas al trazo, diseño y construcción. Todas las decisiones sobre trazo, diseño, construcción y supervisión de la Línea fueron tomadas bajo criterios de eficiencia y conveniencia técnica, de manera colegiada, por las entidades referidas. Todas estas decisiones están documentadas por las actas e informes correspondientes.
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El canciller recordó que para la construcción de la Línea 12 constituyó un consorcio certificador integrado por algunas de las empresas de supervisión de líneas ferroviarias con mayor reputación en el mundo (DB International, IFL, Tüv-Süd, Rail GmbH y Hamburg Consult GmbH).
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