Un juez de control vinculó a proceso a Edwin Antonio Rubio López, conocido como “Max”, “Oso” o “Cabo 100”, presunto operador de la facción de “El Mayo” del Cártel de Sinaloa, por su presunta responsabilidad en los delitos de contra la salud en la modalidad de posesión con fines de comercio de fentanilo, posesión de armas de fuego, de cartuchos y cargadores, todos de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
Encargado del trasiego de droga a los Estados Unidos, para el Cártel de Sinaloa, Rubio López fue detenido tras un enfrentamiento con elementos del Ejército, en un domicilio ubicado en Culiacán, Sinaloa, asegurándole un arma larga, una corta, 218 cartuchos y siete cargadores todos de uso exclusivo. Además, dos bolsas con mil tabletas azules de fentanilo.
Operaba para el Cártel de Sinaloa en Culiacán y Baja California, según autoridades federales.
En audiencia inicial, el Ministerio Público de la Federación (MPF), aportó los datos de prueba para que el Juez otorgara vinculación a proceso y la dictara prisión preventiva justificada, quedan recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano, Estado de México.
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