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El nombre de Juan Luis González Alcántara Carrancá es bien conocido por abogados civilistas de la Ciudad de México.
Es el único hombre que integra la terna y, aunque entre los juristas es reconocido por su amplio conocimiento en derecho familiar y civil, la polémica marcó su historial.
Perteneciente a la dinastía de abogados Carrancá, el doctor en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México se desempeñó como presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México durante la administración de Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno capitalino.
Posteriormente ocupó un lugar como magistrado de la Cuarta Sala Familiar, donde en 2013 formó parte del escándalo desatado por el juicio de pensión alimenticia del ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Genaro Góngora Pimentel, quien actualmente ha presentado una iniciativa de ley para reformar al Poder Judicial de la Federación, con la que busca erradicar el nepotismo.
Además, en julio pasado fue propuesto por Andrés Manuel López Obrador para ser el próximo fiscal General de la República.
En el caso Góngora, el entonces magistrado autorizó la reducción de pensión alimenticia para los dos menores hijos del ministro en retiro, quienes padecen autismo, de 116 mil a 50 mil pesos mensuales.
La madre de los menores, quien fue encarcelada por un supuesto fraude procesal denunciado por el ministro en retiro, alegó tráfico de influencias debido a que González Alcántara Carrancá llevaba buena relación con Góngora Pimentel, pues acostumbraban ir a comer al Club de Banqueros y, a pesar de ello, no se excusó de conocer el asunto.
Al preguntarle al respecto, dijo que la pensión que decretó era justa porque el ministro en retiro tenía otros hijos que dependían de él.
A pesar de ello, ante los senadores dijo que el Poder Judicial de la Federación ha sido constantemente lacerado por conductas tales como el tráfico de influencias.
