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Tras la detención en España del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya , las autoridades judiciales del país investigan al expresidente Enrique Peña Nieto , informó el periódico estadounidense The Wall Street Journal (WSJ).
De acuerdo con el rotativo, un alto funcionario judicial de México le detalló que el exmandatario está siendo indagado como parte de un caso de corrupción del más alto perfil en los últimos años.
La oficina del fiscal general tiene evidencia de que la corrupción de Lozoya Austin llega al más alto nivel, afirmó al WSJ la fuente refiriéndose a Peña Nieto.
“La extradición y [cualquier posible] confesión de Lozoya son elementos que, junto con las investigaciones en curso, decidirán si el expresidente será acusado en el futuro”, se afirmó, de acuerdo con la información difundida ayer por la tarde en el sitio web del diario.
La investigación formaría parte de un amplio caso contra el exdirector de Pemex , quien fue arrestado en Málaga, España, la semana pasada y está esperando una audiencia sobre la solicitud de las autoridades nacionales para su extradición.
La Fiscalía General de la República (FGR) acusó a Lozoya Austin de recibir 10 millones de dólares en sobornos de la constructora brasileña Odebrecht y por irregularidades en la compra de la empresa Agronitrogenados, que ejecutó Pemex durante su gestión.
“La oficina del fiscal general tiene evidencia de que la corrupción de Lozoya en la planta de Agronitrogenados —comprada a Altos Hornos— y Odebrecht llega al más alto nivel”, aseguró el funcionario a The Wall Street Journal.
Sin postura
A través de quienes fueron colaboradores de Peña Nieto durante su mandato, EL UNIVERSAL solicitó una posición del expresidente sobre este señalamiento sin que hubiera una respuesta oficial.
La investigación de México sobre las acusaciones por la constructora Odebrecht se abrió a principios del año 2017; sin embargo, no dio lugar a ningún cargo hasta después de que expiró la administración del extitular del Ejecutivo, a finales de 2018.
Si Enrique Peña Nieto es procesado, sería la primera vez que un presidente nacional enfrenta cargos de corrupción en los tribunales en los últimos tiempos. En cualquier caso, los cargos no son probables a corto plazo, ya que la extradición de Lozoya Austin por sí sola podría llevar varios meses.
En su edición del 18 de junio de 2019, El Gran Diario de México informó que Peña Nieto es investigado por autoridades de Estados Unidos por un presunto soborno en la compraventa de Fertinal, realizada por Petróleos Mexicanos en 2015.
De acuerdo con documentación entregada por un informante bajo pena de perjurio, según las leyes de la Unión Americana, al Departamento de Justicia de ese país y a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unido (SEC, por sus siglas en inglés), el exjefe del Ejecutivo recibió un soborno por “autorizar” la compra de la firma privada con un sobreprecio que dañó el patrimonio de la petrolera y al erario.
El nombre de Peña Nieto se menciona en la documentación que está en poder de las autoridades estadounidenses y que apunta a su “aprobación”, a cambio de sobornos para que Lozoya Austin pagara 635 millones de dólares por Fertinal, “cuando esta empresa era efectivamente insolvente, con cientos de millones de dólares en deuda”, informó El Gran Diario de México.
Las consultoras PricewaterhouseCoopers (PwC) y Binder Dijker Otte (BDO), así como la Auditoría Superior de la Federación (ASF) habían advertido que Fertinal se encontraba en quiebra, pues tenía una deuda bancaria de 264 millones de dólares y que sólo disponía de 12 mil dólares de efectivo en cajas.
La situación de la empresa era tan precaria que un año después de ser adquirida por la entonces paraestatal, el director de Pemex Fertilizantes, Juan Alfredo Lozano Tovar, comentó en la sesión 005 Ordinaria de Consejo de Administración, con fecha del 21 de septiembre de 2016, que “se consolidó la adquisición recibiéndose en una situación de crisis de liquidez, con un capital de trabajo negativo y un riesgo inminente de quiebra.
“Esto generará que se presenten utilidades antes de intereses e impuestos de forma negativa”, explicó en ese entonces.
Por lo tanto, aseveró, era necesario implementar un plan de choque para abatir costos.