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La tensión creció en la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) 9 Pedro de Alba, que tiene 77 días en paro. Padres de familia intentaron ingresar por la fuerza al plantel, mientras autoridades de la UNAM advirtieron que el año escolar está en riesgo y que habrá clases extramuros para evitar que éste se pierda.
Ayer, el conflicto ocurrió cuando estudiantes que están en favor de reabrir el plantel demandaron ingresar entre los gritos de “¡Queremos respuestas!” y para dialogar e intentar llegar a un acuerdo. Los paristas denunciaron que no se les permitía el acceso puesto que, entre los que intentaban entrar había personas “plenamente identificadas como integrantes de grupos porriles”, así como “presuntos padres de familia azuzados por profesores del plantel”.
Ante la negativa de los paristas, un grupo de padres de familia y estudiantes logró romper las cadenas que colocaron los inconformes para mantener cerrados los portones de acceso a la Prepa 9. En medio del forcejeo, desde dentro del plantel fueron lanzados dos cohetones.
Quienes demandan la reapertura del plantel argumentan que “en una votación que se llevó a cabo la semana pasada entre los integrantes de la comunidad, de 3 mil 571 personas que participaron en la asamblea, 2 mil 471 votaron por levantar el paro mientras que mil 6 por continuarlo, dijeron.
Quienes mantienen el paro argumentan que la lucha que se lleva a cabo es más importante que las clases que se están perdiendo y por lo mismo se requiere que las autoridades universitarias den cumplimiento al pliego petitorio donde se demandan investigaciones contra profesores que presuntamente cometieron abusos y hostigamiento sexual contra alumnas, así como abusos e inclusive cobros contra estudiantes.
A través de redes sociales, desde el pasado jueves comenzó a circular un volante en el que se invitaba a una mesa de diálogo con autoridades universitarias ayer a las 13:00 horas; de acuerdo con el documento, el propósito era llegar a acuerdos finales y convenir la entrega del plantel, el cual lleva tomado desde el pasado 12 de noviembre.
Sin embargo, los estudiantes que tienen tomadas las instalaciones se negaron a recibir a Héctor Lecuana Gutiérrez, abogado de la Dirección General de la ENP; Aída Daniela Navarro, secretaria académica de la Prepa 9; y la directora Gabriela Martínez que acudían a una nueva mesa de diálogo. En cambio los volvieron a citar en 15 días para que presenten los avances que se tengan del cumplimiento de su pliego petitorio.
La negativa a iniciar el diálogo se dio porque las autoridades rechazaron firmar una carta para comprometerse a otorgar amnistía a los integrantes del movimiento parista, con el argumento de que ese término es incorrecto y que ya se firmó una carta de no represalias “para quienes han hecho uso de su derecho de la manifestación libre y pacífica”.
El punto de quiebre entre estudiantes y autoridades ha sido la denuncia por daños a la infraestructura, equipamiento e inmobiliario que interpuso la Universidad Nacional Autónoma de México contra quienes resulten responsables. Los paristas piden que la Universidad retire esas denun- cias; la institución responde que esto no es posible y que será competencia del Ministerio Público deslindar responsabilidades.
En tanto, Arturo Ruiz, coordinador general de Enlace de la Secretaría de Prevención de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), informó que esta semana la Dirección General de la ENP dará a conocer el esquema para instaurar clases extramuros, a fin de evitar que se pierda el año escolar.
Agregó que la mayoría de los casos de violencia de género han sido verbales y hay muy pocos que llegan a alguna situación física.
