Primero infiltraron a los grupos de autodefensa de Tierra Caliente, Michoacán, después pasaron a la extinta Fuerza Rural y finalmente regresaron a la delincuencia organizada. Se les conoció dentro del movimiento armado como los “perdonados” por José Manuel Mireles Valverde, subdelegado del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en esa entidad. Hoy integran diversas células criminales causantes de la violencia en el estado.

El fundador de las autodefensas en La Ruana, en el municipio de Buenavista Tomatlán, Hipólito Mora Chávez, asegura que el levantamiento armado empezó bien, pero que poco después se contaminó con los hombres que se quitaron la camisa de templario y se pusieron la de autodefensa, con el beneplácito de Mireles Valverde y del entonces gobierno federal.

A los líderes de los comunitarios de la alcaldía de La Huacana, donde la actual administración tuvo un acercamiento con algunos grupos, se les vincula con el presunto jefe regional en Michoacán del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Miguel Ángel Gallegos Godoy El Migueladas, quien antes sirvió a La Familia Michoacana y a Los Caballeros Templarios, según información a la que tuvo acceso EL UNIVERSAL.

Autodefensas, con criminales entre sus filas
Autodefensas, con criminales entre sus filas

Sánchez Garibay fue representante de los productores de melón en La Huacana, Churumuco, Nuevo Urecho y Lombardia. El grupo de autodefensas se asentó en las comunidades de Zicuirán y El Chauz. Son considerados por las autoridades como los principales bastiones de El Migueladas.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Hipólito Mora reveló que la delincuencia organizada le ofreció encabezar el movimiento y el avión en el que Mireles Valverde se accidentó en enero de 2014 en La Huacana.

“No había dicho que me ofrecieron ese avión unas personas que vinieron a buscarme aquí en La Ruana, pero las rechacé.

“Por eso se lo ofrecieron a Mireles [Valverde]. El avión venía de Guadalajara, pasaron por ropa a Tepalcatepec y después se estrelló en La Huacana”, refirió.

El cabecilla de las autodefensas en Buenavista Tomatlán, Estanislao Beltrán Torres, resultó ser concuño del recluido exlíder de La Familia Michoacana, Jesús Méndez Vargas El Chango.

Después de formar parte de las autodefensas de Buenavista Tomatlán y de la Fuerza Rural, creada por Alfredo Castillo, entonces comisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral de Michoacán, Luis Antonio Torres El Americano, creó el grupo criminal La Tercera Hermandad (H3), con nexos con el Cártel Jalisco Nueva Generación.

De acuerdo con fuentes consultadas por este diario, Estanislao Beltrán Papá Pitufo trabaja actualmente para Los Viagras, mientras que El Americano se encuentra desaparecido, al parecer fue asesinado por sus rivales en la región.

Otros de los que infiltraron a las autodefensas fueron los hermanos Sierra Santana, actuales líderes del grupo criminal Los Viagras, quienes se integraron en 2013 para combatir a sus exaliados Los Caballeros Templarios.

Comandados por Nicolás Sierra Santana, excomandante operativo del G250, grupo de élite de la Fuerza Rural —creado por Alfredo Castillo para capturar a La Tuta—, Los Viagras mantienen actualmente una cruenta disputa con sus exaliados del Cártel Jalisco Nueva Generación por el control de Apatzingán, Buenavista Tomatlán, Parácuaro, Múgica, La Huacana, Churumuco, Uruapan, Los Reyes, Aguililla y Coalcomán.

En Tepalcatepec, los líderes de la autodefensa fueron Juan José Farías Álvarez El Abuelo, así como Juanita Reyes, ambos ligados hasta hace unas semanas al Cártel Jalisco Nueva Generación, grupo criminal que los acusó de traición.

Por otro lado, Alberto Gutiérrez El Comandante 5, estuvo en las autodefensas de Apatzingán y se le vinculó con Los Viagras. Actualmente vive en Estados Unidos.

En Aguililla, a Adalberto Fructuoso Comparán Fruto, expresidente municipal y quien encabezó el grupo de autodefensa, se le vinculó con Los Templarios y ahora con el Cártel Jalisco Nueva Generación.

El 11 de mayo de 2014, el entonces comisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo, puso en marcha a la Fuerza Rural, el grupo policiaco que sustituyó a las autodefensas, el cual estaba integrado por extemplarios que después regresaron a la delincuencia organizada. El cuerpo de seguridad operó en Tepalcatepec, Buenavista Tomatlán, Apatzingán y Nueva Italia.

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