Las hijas del presidente del patronato de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Gerardo Sosa Castelán, son investigadas por recibir depósitos provenientes del supuesto lavado de dinero millonario por el que está acusado su padre.
La Fiscalía General de la República (FGR) consiguió órdenes de aprehensión contra Ana Carmen y Adriana Sosa Cravioto por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita porque según sus investigaciones recibieron un depósito de un millón de pesos y de 800 mil pesos en sus cuentas.
Fuentes allegadas al caso confirmaron que dicho dinero, supuestamente proviene de la empresa Contabilidad del Siglo XXI, Pachuca, S. C., misma que está identificada como fantasma y que forma parte de la red de empresas que, según la FGR, Sosa Castelán utilizó para lavar dinero proveniente de un desvío millonario de los recursos de la UAEH cometido entre 2011 y 2018.
Si las hermanas Sosa Cravioto son aprehendidas, tienen la posibilidad de solicitar al juez llevar su proceso en libertad, pues el lavado de dinero no merece prisión preventiva de oficio, aunque la FGR puede solicitar esta medida pero deberá justificar la necesidad de encerrarlas en prisión.
La FGR imputó a Sosa Castelán, Juan Manuel Hernández Gayosso, María Luisa Montalvo Sierra y María Cruz Álvarez, delincuencia organizada y lavado de dinero.
Los cuatro fueron detenidos el pasado 31 de agosto en cumplimiento a las órdenes de aprehensión emitidas por el mismo juez que también ordenó la captura de las hermanas Sosa Cravioto.