Sólo si madura el consenso a favor de la reforma constitucional que activaría la Guardia Nacional , el Senado discutiría y votaría el tema en periodo extraordinario, dijo el presidente de la mesa directiva, Martí Batres Guadarrama .
De lo contrario, el tema se iría a febrero, en el periodo ordinario, aunque destacó que ha escuchado expresiones de apertura de las fuerzas políticas para alcanzar acuerdos, en los que personalmente trabaja de manera continua.
En ese sentido, también se debe atender a la sociedad organizada, la cual “debe ser más participante y debe intervenir en los debates del Senado y del Congreso en general”.
Batres Guadarrama expresó que el proyecto de decreto de la reforma debe incorporar planteamientos de la sociedad, sobre todo en temas como este que es de especial atención".
Expuso que “hay asuntos que está planteando la sociedad, por ejemplo, mecanismos de control, de reversa, de medios de derechos humanos. Todo eso debe escucharse, atenderse, incorporarse".
El 16 de enero próximo ambas cámaras del Congreso abre sendos periodos extraordinarios. Los diputados para discutir la Guardia Nacional y la prisión preventiva, ambos de rango constitucional. Los senadores deben votar un listado de al menos 10 candidatos a fiscal General de la República, que debe enviar al Ejecutivo, y éste integrar una terna con base en la cual la Cámara Alta elegirá a la primera persona que ocupará ese cargo.
“En el Senado tenemos que abordar forzosamente el tema de la fiscalía por los plazos constitucionales porque tenemos hasta el 17 de enero para aprobar la lista de 10 propuestas para fiscal General que hay que enviar al Ejecutivo federal”.
Expresó que “suponiendo que el 16 se apruebe la Guardia Nacional en la Cámara de Diputados, esa minuta se enviará al Senado y se remitirá a comisiones, y será la Cámara Alta la que decida los tiempos de resolución sobre dicho tema”.
Le corresponde determinar en qué momento resolverá, si dentro del propio extraordinario o hasta el periodo ordinario, lo cual “dependerá de la maduración de la discusión. Si el Senado está listo para la discusión de la reforma, la abordará y si no, será a partir del 1 de febrero”.
Esto, dijo, “tiene que ver con el avance de los consensos”.
Recordó que “como es reforma constitucional, requiere dos terceras partes, y el grupo mayoritario por sí sólo no puede aprobarlo, necesita el acuerdo con otras bancadas”, y podría lograrlo con la suma de un grupo parlamentario, con dos, con cuatro.
“Como presidente del Senado soy partidario de hablar con todos y llegar a consenso con todos.
Además hay que escuchar los planteamientos que tienen todas las fuerzas políticas. Creo que hay planteamientos importantes”, señaló.
Martí Batres Guadarrama expresó que “deseo que haya consensos. Yo escuché los posicionamientos de los grupos parlamentarios y vi apertura. Esa es mi impresión. Hay que hablar y recoger propuestas de los otros grupos parlamentarios y de la sociedad”.
Se le comentó qué hay voces que aseguran que la Ley de Seguridad Interior está disfrazada de Guardia Nacional, lo cual rebate el presidente del Senado.
“La Ley de Seguridad Interior se aprobó sin reforma constitucional; hablaba de la participación de las fuerzas armadas en los temas de seguridad. Esta reforma no es sobre seguridad interior, es sobre seguridad pública, y busca apoyarse en un cuerpo que ya está mencionado en la Constitución, que es la Guardia Nacional, en ocho artículos: el 10, 31, 35, 36, 73, 76, 78 y 89. Son proyectos muy diferentes”.
Subrayó que “para hacer realidad el proyecto que tiene el gobierno de seguridad pública , porque ese es el tema, habría que hacer estas reformas constitucionales”.
Planteó que “en España y en Francia existen cuerpos parecidos. En España, la Guardia Civil; en Francia la Gendarmería. Son Policías, es decir, atienden, no a la defensa de la soberanía del país, sino atienden al orden interno, pero están organizadas sobre la base de ciertas estructuras o disciplinas castrenses. Es algo parecido, no es igual. Ello hay que debatirlo, y al respecto “hay asuntos que está planteando la sociedad, por ejemplo, mecanismos de control, de reversa, de medios de derechos humanos. Todo eso debe escucharse, atenderse, incorporarse”.
Comentó que en el tema de la Guardia Nacional, “la sociedad debe ser más participante y debe intervenir en los debates del Senado y del Congreso en general y, además, los proyectos legislativos deben incorporar planteamientos de la sociedad, sobre todo en temas como este que es de especial atención”.
El senador Batres Guadarrama indicó que “hay dos grandes temas que equilibrar, por un lado la seguridad pública que es gran demanda de la sociedad, pero por otro lado también está el cuidado de los derechos humanos, que es otra gran preocupación y ambos temas deben de incorporarse de manera equilibrada.
De acciones de Morena en la Cámara de Diputados que denotan prisa porque haya la reforma constitucional para la Guardia Nacional, Batres dijo que “el reclutamiento al que ha llamado el gobierno recientemente, en este momento no entra en contradicción con la Constitución, finalmente como decía, la Guardia Nacional está mencionada en la Constitución”.
jno
