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En cuestión de cuatro horas el gobierno federal cerró el año con una mega subasta de la que obtuvo más de 33 millones de pesos, en la que la venta de siete vehículos de lujo fue la más aplaudida por participantes y espectadores.
“¡Uy quiero ese!”, señaló una mujer al entrar al complejo cultural de
donde se exhibían los vehículo, que se venderían una hora más tarde en este ejercicio realizado por el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE).
El policía federal que custodiaba el Lamborghini Huracan Coupe modelo 2019 que señaló la visitante le sonrió y bromeó: “pues anímese”, dijo.
La mujer, que portaba una bolsa de Liverpool, recorrió el pasillo en el que se exhibían los siete autos de lujo que le fueron asegurados a Héctor Ortiz Solares “El H-1”, líder de una banda de hackers, y las camionetas del Estado Mayor Presidencial que formaban parte de la oferta de este domingo en el segundo día de la llamada “ Madre de todas las subastas ”.
La cita fue a las 10 horas pero la carpa comenzó a llenarse alrededor de las 10:40 de la mañana, la mujer que bromeó sobre comprar el Lamborghini Huracan Coupe tomó su lugar en la última fila de sillas y cuando los compradores subieron sus paletas para marcar el inicio de la subasta, ella hizo lo propio, había pagado 5 mil pesos de garantía para participar por algunos de los lotes.
Casi dos horas después la mayoría de los 65 lotes de joyas y vehículos se declaraban desiertos y los pocos que se vendieron no subían del precio inicial.
La mujer que bromeó sobre el Lamborghini vio una y otra vez la lista de lotes, hizo sumas y pidió información hasta que se decidió a alzar nuevamente su paleta, la número 20, para ofrecer 25 mil pesos por un anillo de 14k con 29 diamantes de .038q corte cuadrado y un diamante 0.50q corte redondo. La mujer resultó ganadora de la puja.
Tres horas después de iniciado el evento se declaró un breve receso, después del cual fue vendido un reloj en más de un millón de pesos, mismo que había sido ofrecido en casi tres millones de pesos en una subasta en el mes de julio pasado.
En cuanto se anunció el inicio de las pujas de los autos de lujo, los visitantes de Los Pinos se congregaron afuera de la carpa de subastas curiosos por conocer quienes se llevarían los carros de colección.
En los cuatro primeros carros de “El H-1” la puja se definió entre dos compradores que se retaban incrementando sus ofertas, los asistentes aplaudían.
Tanto que en la venta del Lamborghini Huracan del año llegaron a animar a los compradores con un “sí se puede, sí se puede, sí se puede”. El ganador de la puja pagará 5 millones 600 mil pesos por el carro.
rmlgv
