Diversas organizaciones exigen a autoridades mexicanas que se cumpla el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna, el cual establece que la publicidad de fórmulas lácteas infantiles no se debe difundir por ningún medio de comunicación.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Paulina Magaña, coordinadora de la campaña de salud alimentaria de la asociación civil sin fines de lucro El Poder del Consumidor, explicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva por seis meses y solamente 33% de los bebés en México son amamantados.

Lo anterior se debe a que las fórmulas comerciales infantiles tienen un alcance importante debido a la publicidad de los fabricantes, dijo.

De acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública, destacó Magaña, las mamás que reciben “bombardeo” de publicidad tienen 61% menos de probabilidad de amamantar.

“Desde El Poder del Consumidor y otras organizaciones pedimos el cumplimiento del Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna que se ratificó por México hace más de 40 años y prohíbe este tipo de prácticas comerciales”, expresó.

Dicho código establece explícitamente que no se debe hacer publicidad ni utilizar otras formas de promoción al público en general, incluida la publicidad a través de medios de comunicación tales como la televisión, las revistas, las vallas publicitarias, los sitios web y las redes sociales.

“Detectamos que en redes sociales las empresas están haciendo publicidad específicamente con mamás influencers. Se considera engañosa porque no se dice que es publicidad, se puede interpretar como una recomendación personal tanto de mamás influencers como de profesionales de la salud, que tienen una gran influencia en la población”, advirtió la también investigadora.

Ante esto, la organización hace un llamado a las instancias de gobierno a que realicen un monitoreo efectivo para sancionar a todos los fabricantes que no cumplen con el Código Internacional en México y para que no haya publicidad de fórmulas infantiles.

“Los productos están porque sí hay necesidades específicas en donde un profesional de la salud puede recomendar estos productos, pero no debería haber publicidad”.

Otras de las prácticas de estas empresas es patrocinar congresos de nutrición infantil. “Todo eso está prohibido por el Código (…) la demanda no va hacia prohibir las fórmulas, sino hacia prohibir su promoción”, reiteró Magaña.

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