Como una contradicción califican especialistas en educación la eliminación del Programa de Escuelas de Tiempo Completo (PETC) por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que hace un par de años realizó un diagnóstico en el que resaltó los beneficios de esta estrategia, a la que finalmente suprimió el pasado 1 de marzo.
Consultados por EL UNIVERSAL, los expertos perciben que no existen visos para que la SEP, a cargo de Delfina Gómez Álvarez, restituya este programa, que fue respaldado por el extitular de esa dependencia y actual embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma.
“Me consta que el secretario Moctezuma peleó esta estrategia porque se realizaron una serie de conversaciones con algunos secretarios de Educación estatales para dimensionar el impacto de las escuelas de tiempo completo”, asegura Juan Alfonso Mejía, exsecretario de Educación Pública y Cultura en Sinaloa, y especialista en temas educativos.
Expone que incluso se realizaron encuentros con los legisladores integrantes de la Comisión de Educación de San Lázaro para abordar los efectos de ese programa en el sistema educativo nacional: “En esas reuniones, me tocó escuchar lo que opinaba el entonces secretario de Educación, quien defendía la estrategia, pues estaba consciente de que el programa daba resultados”.
Señala que haber desaparecido este plan es contradictorio en varios sentidos, ya que este gobierno, que dice estar del lado de los sectores más desfavorecidos, eliminó una estrategia que ayudaba a subsanar desigualdades: “Es bastante contradictorio que si lo que estás buscando es apoyar a quienes tienen menos oportunidades, le arranques de raíz uno de los programas que les brindaba mejores oportunidades”.
Agrega que cuatro de cada 10 niños viven en una familia en la que una mujer es la jefa del hogar, por lo que quitar este programa las afectó a ellas laboralmente.
“Una estrategia de esta naturaleza representaba una gran oportunidad para las mujeres que tenían que trabajar, por lo que se ahondarán esas inequidades por las que este sector de la población ha venido luchando desde años”. Indica que cuatro de cada 10 alumnos de educación básica comían en los planteles y añade que el sistema de enseñanza nacional se ha inundado de contradicciones.
Investigadora en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Alma Maldonado señala que desde el inicio de este sexenio ya se tenía la intención de acabar con el PETC, con todo y los argumentos a favor del exsecretario Moctezuma.
La especialista está convencida de que la SEP desapareció el programa sin conocerlo a profundidad: “Es evidente el desconocimiento de este programa por parte de la Secretaría de Educación Pública, ya ni se diga del Presidente, quien desconoce bastantes cosas del sistema educativo. Es claro que, con todas las declaraciones que ha dado Delfina Gómez, se desconocen los alcances de esta estrategia, que dudo que se restituya”, añade.
Refiere que la decisión que existe entre algunos gobernadores para que continúen las Escuelas de Tiempo Completo profundizará aún más las desigualdades entre los estudiantes de educación básica, ya que algunos tendrán oportunidad de contar con una jornada escolar ampliada que beneficiará su aprendizaje, mientras otros seguirán enfrentando el rezago educativo.
Arcelia Martínez Bordón, integrante del Departamento de Educación de la Universidad Iberoamericana, asegura que la decisión de desaparecer el Programa de Escuelas de Tiempo Completo es grave, irresponsable y equivocada. Argumenta que “la política educativa de este sexenio denota un desconocimiento y falta de compromiso con la mejora de los aprendizajes.
“No se va a lograr que más estudiantes aprendan o que se cierren las brechas educativas entre ricos y pobres a partir de becas universales o de entrega directa de recursos a las escuelas, como en el caso de La Escuela es Nuestra, que más bien parecen ser intervenciones de alta rentabilidad política”, menciona.
Y expone que es contradictorio y muy preocupante que la SEP haya desaparecido un programa que ha mostrado efectividad en la reducción de brechas de aprendizajes entre estudiantes de sectores favorecidos y desfavorecidos de la población.