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Con gritos de “¡vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, “¡ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos!”, familiares y amigos de los 43 normalistas desaparecidos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero, se concentraron afuera de la Embajada de Israel en México, ubicada en la alcaldía Miguel Hidalgo de la capital mexicana.
Los manifestantes exigieron que se acelere la extradición del extitular de la desaparecida Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio, quien es señalado como uno de los implicados en el caso.
A cuatro días de que se cumplan ocho años de la desaparición de los normalistas, jóvenes con el rostro cubierto efectuaron pintas en la fachada de la embajada con las leyendas “Palestina vive”, “Palestina libre”, “muerte al sionismo”, “extradición a Tomás”, y destruyeron cámaras de seguridad.
Vidulfo Rosales, abogado de los padres de los estudiantes, exigió a la sede diplomática y al gobierno de Israel su compromiso con los derechos humanos a tenor de lo que establecen las convenciones internacionales en materia de tortura y de desaparición forzada.
“Son crímenes en todas las constituciones, todos los tratados internacionales… es necesario que el gobierno de Israel actúe contra Tomás Zerón, de lo contrario nos queda claro que este país protege a criminales.
“Protege a violadores de derechos humanos, entonces tiene nulo compromiso en la lucha contra la tortura y la desaparición forzada”, refirió acompañado de los padres que portaban las imágenes de sus hijos.
Aseguró que Zerón fue el artífice que el Estado utilizó para construir la llamada “verdad histórica”, que tuvo por objeto ocultar el paradero de los jóvenes y encubrir a los responsables de la desaparición de los normalistas.
“Llevamos años en que el gobierno de Israel no atiende la solicitud del gobierno federal de la extradición de un criminal... si un torturador se encuentra en su país debe extraditarlo, se deben agilizar los trámites legales”, aseveró Rosales.
Destacó que tienen pruebas de que Zerón acordó con policías ministeriales que le entregaran 10 restos, mismos que llevó al río San Juan de Cocula en Guerrero, con la intención de ocultar el paradero de los normalistas y encubrir a los responsables.
Blanca Nava, madre de Jorge Álvarez Nava, señaló que al exfuncionario lo tienen resguardado en Israel a pesar de que debe pagar delitos en México.
“Este señor participó en la ‘verdad histórica’ de Jesús Murillo Karam, extitular de la entonces Procuraduría General de la República y quien actualmente permanece en el Reclusorio Norte. No vamos a parar hasta saber el paradero de nuestros hijos.
“Él tiene que pagar. Nos quiso engañar con tantas mentiras, sembrando pruebas… estamos luchando para encontrar a nuestros hijos. Exigimos a la embajada que sea devuelto Tomás Zerón, basta de encubrir a criminales”, recalcó.
Por otra parte, familiares de los jóvenes que pidieron el anonimato comentaron a este diario que la detención del general José Rodríguez y de otros militares significa que hay pruebas para que paguen por lo que hicieron. “Nuestro abogado dice que vamos por buen camino, pero todo esto lleva mucho tiempo”.
Al concluir el mitin, que duró alrededor de dos horas, los inconformes se retiraron a bordo de más de 20 autobuses.
La movilización forma parte del segundo día de protesta en la Ciudad de México por el octavo aniversario de la desaparición de los estudiantes.
En octubre de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer el contenido de una carta que envió al primer ministro de Israel, Naftali Bennett, para solicitar la extradición del exservidor público acusado de torturar y manipular pruebas para crear la versión de la “verdad histórica”.
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