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La Presidencia de la República tomará medidas para una mayor seguridad en la correspondencia que va dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador. Esto, luego de que el miércoles le estalló un libro con un explosivo casero a la senadora de Morena Citlali Hernández.
Sin embargo, en conferencia de prensa en Palacio Nacional, el Presidente de México aclaró que a él lo cuida la gente y que “el que lucha por la justicia no tiene nada que temer”.
En la Oficina de Presidencia existe todo un sistema que se utiliza para tener certeza y seguridad sobre lo que recibe el Ejecutivo.
“El Presidente, digamos, tiene la certeza de recibir regalos, mensajes, cartas y peticiones de mano propia, cuando ya hay una seguridad”, detalló el vocero de Presidencia, Jesús Ramírez.
Tras el ataque a la senadora, López Obrador llamó a evitar cualquier acto de violencia y enfatizó en que la Fiscalía General de la República (FGR) investiga el caso.
El presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo (Morena), dijo ayer que la seguridad en el Congreso de la Unión debe fortalecerse, y aclaró que “una bomba casera no pone a temblar al Estado mexicano”.
“A esto le llamamos ‘estirar la noticia’, llevándola a un plano inverosímil. Hay que reforzar [la seguridad] aquí [en San Lázaro]”, declaró.
Muñoz Ledo descartó que el evento haya sido un atentado por parte del crimen organizado. En cambio, refirió que el ejercicio del parlamento abierto “corre riesgos”, pero no por eso va a dejar de llevarse a cabo.
