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Trabajadores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) que fueron despedidos la semana pasada del organismo rechazaron ser “aviadores” y, al contrario, aseguraron que se quedaban a trabajar más horas de las debidas.
Exigen que se les reinstale en sus antiguos empleos o se les indemnice conforme a ley.
Además, aseguran, en el país han sido cesados cerca de 15 mil trabajadores del organismo federal.
En una reunión con medios de comunicación tras manifestarse frente al Palacio Nacional, Leonor Lovera, ex empleada del SAT, y quien laboró ahí por más de 23 años, rechazó lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador la semana pasada acerca de que entre los despedidos había “aviadores” o personas que cobraban doble o triple sueldo.
“No somos aviadores ni personas que cobren doble o triple, que le informen bien al Presidente. Somos trabajadores, cumplimos con un horario y hay veces que nos quedamos más horas.
“Nos dicen que como somos de confianza, que ganamos mucho, pero les pedimos que revisen la nómina, no ganamos tanto. Creo que el Presidente no está bien informado, estamos arribita de los sindicalizados, me parece que un sindicalizado gana más”.
Junto con 50 trabajadores despedidos, Leonor Lovera señaló que debido a que no han recibido una respuesta satisfactoria por parte del gobierno federal, recurrirán a organismos de derechos humanos y de defensa de los trabajadores, “porque no hacen caso de nada”.
Informó que la mayoría de los trabajadores despedidos tienen pagos pendientes, como la prima vacacional y 50% de su gratificación de fin de año: “Nos están condicionando estos pagos, nos dicen ‘o firmas o no te pagamos’”.
Leticia Ramírez, responsable de atención ciudadana del Presidente, informó que se revisará cada caso de las personas que se han presentado a Palacio Nacional, pero será el SAT el que se ponga en contacto con los empleados.
“Se comenzará a hablar con ellos [con los manifestantes] esta semana. El SAT les va a responder, desde que vinieron se les informó que se revisarán todos los casos”.
Ante esto, Leonor Lovera consideró que era una “respuesta equis”, debido a que “somos 15 mil personas y van a revisar caso por caso, se van a tardar mucho y nos urge que nos respondan antes del 31 de diciembre. Que nos den una respuesta bien: si es una indemnización, que nos paguen conforme a ley”.
En el tema de la creación de un sindicato que agrupe a los trabajadores de confianza despedidos, como lo dio a conocer EL UNIVERSAL, Leonor Lovera señaló que esperan que esto pueda concretarse debido a que “los trabajadores de confianza estamos totalmente desprotegidos. Dicen que ganamos mucho, es erróneo, les pedimos que revisen la nómina y vean lo que realmente percibimos”.