Con el Programa de Apoyo para el Bienestar de las Niñas y Niños hijos de madres trabajadoras para el ejercicio fiscal 2019, la Secretaría de Bienestar prevé que las Estancias Infantiles continúen operando con las cuotas que paguen los padres de familia.
Así lo explicó la titular de la Secretaría, María Luisa Albores González, quien detalló que para ello la dependencia prevé, para finales de marzo, tener listo el censo que actualmente elabora para identificar el número de familias y niños que requieren el apoyo y poderles entregar los recursos a los padres o tutores correspondientes a los meses de enero, febrero y abril.
“Estamos planteando terminar un censo donde estamos visitando a tutor por tutor para ver cuántos niños tiene y en este sentido canalizar directamente el apoyo para el sistema de cuidados”, dijo.
“Estamos cuidando que, después de que levantemos el censo, se entregue lo que es enero, febrero e inmediatamente vamos a dispersar marzo y abril porque estamos planteando que el recurso venga un mes antes para que quienes tengan las estancias no esperen el recurso hasta finales de mes”, dijo.
Precisó que, para garantizar que los recursos se entreguen a las familias en beneficio del cuidado de los niños, el DIF nacional se encargará de vigilar las gestiones que realizará la Secretaría.
“Antes se entregaba un recurso de 950 pesos mensuales por niño a cada estancia, pero una vez que terminemos el censo daremos a conocer que había estancias que tenían ocho niños pero reportaban 35, por eso se habla de ´niños fantasma´”, comentó.
“El DIF del sexenio pasado en el último informe que dejó nos habla de que el 30% de las casi 10 mil estancias infantiles tienen foco verde que son las que pueden continuar, hacía este informe porque el DIF supervisaba aunque el recurso se entregaba a través de la Sedesol directamente a las responsables de las estancias y por eso ocurrió esto de que inflaban los números”.
Por ello, insistió en que a través de la nueva modalidad, la responsabilidad de decidir dónde se brindará el cuidado a sus hijos será de los padres, razón por la que no cerrarán las estancias.
“No depende de nosotros que se cierren las estancias, nosotros vamos a seguir canalizando el apoyo y ese apoyo, en el caso de estancias que están funcionando muy bien los mismos padres de familia recomendarán esa estancia”, agregó.
“No se elimina el programa de estancias, nunca hemos planteado eso, lo que existe es un cambio en las entregas, sí vamos a supervisar a través del DIF que ese recurso sea canalizado para el cuidado”.
De acuerdo con las reglas de operación publicadas en el Diario Oficial de la Federación, los padres de familia recibirán 800 pesos mensuales por cada niño con pago bimensual para que se entregue por adelantado lo del mes siguiente y se prevé que los reciban a través de una tarjeta de Bienestar.
Confió en que el 70% de las estancias que, según el DIF, no cuentan con foco verde para seguir operando se ajusten y reúnan los requisitos para continuar dando el servicio.
Por ello, no descartó la posibilidad de que una vez identificado el número real de niños que requieren el servicio y las condiciones de las estancias que existen en el país, se pueda solicitar un incremento en el presupuesto asignado, que actualmente es de dos mil 200 millones.