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Al anunciar la apertura al público de archivos secretos de las direcciones Federal de seguridad (DFS), General de Investigaciones Políticas y Sociales (DGIPS) y del extinto Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) desde 1920 a la fecha, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, dijo que esos documentos podrían ser utilizados por las víctimas para denunciar a los culpables de espionaje.
“Esa es la importancia que tiene la apertura, si procede que se enjuicie, se castigue a responsables, y si lo van a hacer los espiados, afectados, perseguidos, pues eso es otro capítulo, es otra etapa, tienen todas las libertades, [hay que] hacerlo nada más en el marco de la legalidad y ya”, dijo.
Dijo que los documentos secretos del Cisen que estarán a disposición en la que fuera la cárcel de Lecumberri, donde hoy se encuentra el Archivo General de la Nación (AGN), podrían ser utilizados para realizar denuncias por espionaje, sólo si se trata de pruebas válidas, actos vigentes y no prescriben.
Esto, luego de que firmó un decreto para que las 7 mil 314 cajas de documentos secretos y resguardados por el Archivo General de la Nación —desde 1920, cuando fue presidente Venustiano Carranza, a 1985— puedan ser abiertos para consulta pública; además se instruirá a las dependencias federales, incluidas el Ejército y la Marina, a que entreguen toda información desde 1985 a la fecha relacionada con corrupción, violaciones a los derechos humanos y persecución política.
López Obrador aseguró que se abrirán todos los archivos desde que comenzó la investigación y espionaje político y a opositores.
“Mucha gente fue reprimida sin que se les comprobara nada. Era nada más lo que suponían los policías políticos. [Fue] una etapa negra en la vida pública del país, por eso se tiene que conocer. Y nunca más espiar, ni perseguir a nadie, para eso es que se está haciendo esto”, aseveró.
Subrayó que su gobierno decidió no borrar nada de los archivos secretos, solamente atenerse a las reservas de la Ley de Protección de Datos Personales.
En su conferencia de prensa mañanera, el director del AGN, Carlos Ruiz Abreu, detalló que personal (especialistas en biblioteconomía y archivonomía) del archivo acudirá personalmente a cada secretaría de Estado para hacer un diagnóstico y que sea transferida la documentación de manera correcta.
El director del AGN explicó que toda la información estaba bajo llave en una galera y era custodiada por policías; agregó que digitalizar el archivo les tomará unos dos años.
La información desde 1985 a la fecha será recabada por el archivo general para después clasificarse y digitalizarse, posteriormente será abierta al público por medio de diversos mecanismos.
Durante la rueda de prensa, el presidente López Obrador pidió perdón a nombre del Estado a todas las víctimas de persecuciones y represión “del régimen autoritario” y se comprometió a que no habrá más espionaje y tampoco a crear archivos secretos de adversarios.
La apertura de archivos, aseguró, es un homenaje a todos aquellos luchadores y políticos que fueron perseguidos en sexenios anteriores, incluso asesinados.
“Un homenaje a quienes fueron víctimas de la persecución del régimen autoritario pasado es esto que estamos haciendo, desde luego siempre recordarlos con mucho respeto, a los que han sido víctimas de represión y más a los que perdieron la vida, que fueron asesinados, nuestro reconocimiento permanente, perdón a nombre del Estado”, dijo.