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Adiferencia de aquella sesión de enero de 2015, que duró más de seis horas y en la que se requirieron 32 rondas de votación para desempatar a Luis María Aguilar Morales y Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, ahora la presidencia del máximo tribunal y del Consejo de la Judicatura Federal se define en apenas 10 minutos y al primer conteo de votos.
Son siete votos los que convierten ahora a Zaldívar en el primer ministro que no proviene de un tribunal local ni federal en presidir al Poder Judicial de la Federación. Sus contrincantes en la contienda reciben apenas dos votos cada uno. Se trata de la llegada al escaño más alto de la carrera de un jurista mexicano que reivindica también el papel que desempeñan los litigantes en el ejercicio diario del Derecho.
Este martes, los ministros tenían previsto iniciar sus actividades desde las 11 de la mañana, pero desde las 04:00 horas, 600 efectivos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de la Ciudad de México implementan un operativo de seguridad ante la convocatoria emitida por el activista del partido Morena, Armando Monter, a “encadenar” el edificio de la SCJN.
Desde la avenida Pino Suárez, un grupo de aproximadamente 50 personas realiza protestas para exigir la renuncia de los ministros por los altos salarios que perciben.
A pesar de la presencia de los manifestantes, los ministros ingresan al edificio sin contratiempos e inician trabajos sin retraso e inconveniente alguno.
Al interior del edificio, los integrantes de la Corte dan la bienvenida a Juan Luis González Alcántara Carrancá, cuya ceremonia de entogamiento dura 45 minutos.
Luego de un receso de media hora, los ministros regresan al pleno para la votación en la que Zaldívar resulta favorecido.
De manera sorpresiva, antes de que los ministros emitieran sus votos, Alberto Pérez Dayán declinó su candidatura a la presidencia de la Corte, por lo que la elección debía definirse entre Zaldívar, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Jorge Mario Pardo Rebolledo.
La toma de protesta no dura ni cinco minutos, al final de la cual, el nuevo presidente de la Corte pronuncia su primer discurso como cabeza del PJF.