Hace unos días, el presidente Andrés Manuel López Obrador propueso que su gobierno aplique un nuevo modelo alternativo para medir el crecimiento económico del país, en el cual se tome a consideración el "bienestar" y la felicidad de la gente.
Sin embargo, esta medida ya había sido anunciada por Nueva Zelanda en 2019. En ese año se presentó una propuesta de " bienestar ", que priorizaba la mejora en la calidad de vida frente a los indicadores económicos.
No obstante, la oposición de este país la tachó de "institucional", ya que pretendía que el gastos se centrara para ayudar a la población más vulnerable .
"En nuestro primer Presupuesto del Bienestar estamos midiendo y prestando atención a lo que valoran los neozelandeses: la salud de nuestra gente y nuestro medio ambiente, los puntos fuertes de nuestras comunidades y la prosperidad de nuestra nación", aseguró en ese año el ministro de Finanzas, Grant Robertson, ante el Parlamento.
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Según ese país, este presupuesto tiene como propósito beneficiar a los sectores más vulnerables de la población, por lo que introduce nuevos gastos en salud mental , la lucha contra la pobreza infantil y la violencia doméstica.
Esta semana, López Obrador recordó que el Plan de su gobierno para salir adelante, se basa en beneficiar a los de abajo porque eso, al mismo tiempo, ayuda a los de arriba.
Por ello, adelantó que este fin de semana dará a conocer los fundamentos de un nuevo modelo económico basado en los parámetros de "bienestar".
“Ahora con la cuarentena como no puedo salir, me está sirviendo para la reflexión y para el análisis. Este fin de semana voy a publicar un texto sobre la nueva economía, que tiene que ver con todo esto que hemos hablado, de cómo hay que cambiar los parámetros, y no estar pensando en el PIB y ni el crecimiento, sino en el bienestar y la felicidad del pueblo”, destacó.
***Con información de EFE
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