En julio de 2009, EL UNIVERSAL documentó irregularidades y el desvío de recursos de los programas gubernamentales ProÁrbol y Procampo que por años fueron otorgados a políticos, funcionarios y gobernadores, pero también a narcotraficantes y a sus familiares a lo largo de distintas administraciones.
Este diario publicó en primera plana que el plan gubernamental Programa de Apoyos Directos al Campo, Procampo (creado en 1994 por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari y reproducido por los gobiernos de Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón), había otorgado recursos a narcotraficantes de los cárteles de Sinaloa, Juárez, del Golfo y del Milenio, así como a sus familiares, durante años y al menos hasta 2008, según el padrón de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa).
De acuerdo con los datos publicados entonces por EL UNIVERSAL, sólo los familiares de uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, Ismael El Mayo Zambada, cobraron, entre 1998 y 2003, la cantidad de 998 mil 267 pesos de Procampo.
Una de sus hijas, María Teresa Zambada Niebla, solicitó el subsidio para la siembra de 80 hectáreas sin notificar, como se requiere, el giro que le daría a sus tierras.
Los hermanos de Joaquín El Chapo Guzmán Loera, otro de los líderes del Cártel de Sinaloa, recibieron apoyo por 376 mil 198 pesos. Jesús, Ofelina y Aureliano obtuvieron dinero federal todavía en el ciclo primavera-verano de 2008.
Los Carrillo Fuentes, relacionados con los últimos líderes del Cártel de Juárez, figuran 44 veces en el padrón y recibieron montos que van desde 2 mil 607 pesos hasta 2 millones 450 mil 581.
Ventura Valencia, hermano del fundador del Cártel del Milenio, Luis Valencia Valencia, asesinado en 2008, cobró casi 50 mil pesos para la siembra de pasto perenne en cuatro hectáreas.
Humberto García Ábrego, hermano del jefe del Cártel del Golfo, Juan, hasta que fue deportado a Estados Unidos en 1995, recibió 342 mil 384 pesos para la siembra de maíz y sorgo. Redacción