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Tijuana, BC.— Elba Esther Gordillo Morales vendió la propiedad que mantenía en el exclusivo fraccionamiento de Coronado Cays, en San Diego, California, Estados Unidos, a la empresa 1 Green Turtle LCC, en 3.75 millones de dólares.
Fuentes de la familia Gordillo confirmaron a EL UNIVERSAL la transacción y afirmaron que es parte de un reordenamiento que la exlideresa sindical está haciendo de sus bienes.
“¡Rara oportunidad! Construye la casa de tus sueños en los prestigiosos Cay Coronado!”, ofertaba en su página de internet una de las empresas inmobiliarias encargada de vender la mansión que Gordillo Morales dejó prácticamente abandonada y en plena construcción, tras su detención, ocurrida en febrero de 2013.
EL UNIVERSAL confirmó con el Registro Público de San Diego que la escritura con el número 615-100-14-00 establece que el 15 de noviembre la empresa 1 Green Turtle LCC adquirió la propiedad situada en la calle 1 Green Turtle Road, Coronado, California, 92118. En dicho documento, la dirección para la declaración de impuestos viene acompañada del nombre de quien adquirió el inmueble.
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Para su nueva venta, el responsable de firmar la transacción fue Luis Antonio Lagunas Gutiérrez, actual pareja de Gordillo, mediante un documento certificado por un notario de ese condado que lo autorizó legalmente para realizar la venta del inmueble, donde la exdirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) dormía ocasionalmente cuando viajaba al norte del país.
La compañía 1 Green Turtle LCC compró la propiedad por 3 millones 750 mil dólares. Dicha empresa se encuentra registrada en la página oficial de la Secretaría del Estado de California, en la sección de empresas bajo el régimen de Sociedad de Responsabilidad Limitada (LCC, por sus siglas en inglés).
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Se trata de un lote de 8 mil 500 pies cuadrados (789.67 metros cuadrados) con vistas panorámicas a la Bahía de San Diego y México, con dos muelles para botes.
El plan arquitectónico contemplaba la construcción de más de siete habitaciones, más de ocho baños, techos abovedados, una habitación principal con sauna y baño, ascensor, piscina, spa, además de habitaciones para el personal y un cuarto de control de la piscina.
Esta propiedad, junto con otra ubicada en el número 23 de Green Turtle Road, también en Coronado Cays, en San Diego, adquirieron notoriedad tras la detención de Gordillo Morales en febrero de 2013.
La propiedad se encontraba a la venta al menos desde febrero de 2019 y el precio que se pedía, de acuerdo con las páginas de bienes raíces, era de 4.5 millones de dólares.
