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Este jueves se llevó a cabo la presentación del libro “Historia de la pluralidad en EL UNIVERSAL. La construcción de la democracia en México. Los candidatos presidenciales de oposición en 1988” , que recopila artículos de Rosario Ibarra de Piedra, Manuel Clouthier, Heberto Castillo y Gumersindo Magaña.
A continuación se presenta el discurso íntegro de la arquitecta Laura Itzel Castillo Juárez , hija del ingeniero Heberto Castillo Martínez, quien destacó el compromiso del Gran Diario de México con la libertad de expresión al hacer escuchar diversas propuestas de cuatro editorialistas de oposición al régimen.
Buenas tardes, tengan todos y todas ustedes.
Es para mí un gusto acompañarlos y compartir estas palabras en la presentación del libro “Historia de la Pluralidad en EL UNIVERSAL: La construcción de la democracia en México”.
Como muchos de ustedes saben, Heberto Castillo , mi padre, supo resistir las amenazas, la represión, la tortura y la cárcel, así también, rechazar los múltiples intentos del poder para corromperlo y hacer frente a los afanes de cooptación del régimen.
Tuvo además la capacidad y lucidez para sobrevivir a las muchas crisis de la izquierda sin perder el rumbo. Como bien se asienta en el libro que hoy se presenta, Heberto dijo en 1988: “No es el caso discutir quién tiene más larga trayectoria o quién ha padecido más persecuciones de la clase en el poder, no se trata de dilucidar tal cosa, sino de proponer al pueblo un candidato a la Presidencia de la República que sostenga un programa de avanzada, democrático, que anteponga los intereses del pueblo a los de la banca internacional y los grandes empresarios foráneos. Y que aglutine a su alrededor el mayor número de ciudadanos para llegar a la Presidencia y poder desarrollar ese programa democrático.
Este candidato sin duda, decía, es Cuauhtémoc Cárdenas : “Reconocer no es declinar a nada, a no ser al sectarismo o a los intereses personales o de grupo que a menudo nos dominan”.
La declinación de Heberto Castillo a favor de la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas a la Presidencia de la República, además de ser un acto generoso y de consecuencia, sentó las bases para la posterior formación del Partido de la Revolución Democrática. Más adelante, el PMS, dispuesto a desaparecer, cedería su registro para la creación del nuevo partido.
Para Heberto, las distancias entre los que enarbolaban los ideales de la revolución mexicana y los marxistas no eran tan grandes, había que retomar los ideales de los revolucionarios plasmados en la Constitución de 1917 y proyectarlos al presente y al futuro.
El libro, en sí, es un testimonio escrito de la participación de cuatro editorialistas de oposición al régimen, que contendieron a la elección presidencial de 1988 en un contexto donde prevalecía la hegemonía del PRI como partido del Estado.
En ese entonces, EL UNIVERSAL sirvió como medio para hacer escuchar diversas propuestas a través de las plumas de Rosario Ibarra, Manuel Clouthier, Gumersindo Magaña y Heberto Castillo, con lo que se muestra su compromiso con la libertad de expresión .
Con el libro que hoy se presenta, se puede hacer un recorrido a través de los diferentes artículos de cada uno de ellos y encontrarse con el interesante análisis que sobre los mismos realiza José Woldenberg. El libro, finalmente, da cuenta del proceso preelectoral hasta el fraude de Salinas de Gortari y la lucha postelectoral a través de las páginas de EL UNIVERSAL.
Amigas y amigos, recuerdo que estando en prisión en 1970, Heberto sentenció: “Moriremos cumpliendo con nuestro deber, comprendiendo que cuando los hombres mueren así, se convierten en semillas de libertad para el pueblo”.
Así fue y así será, querido Heberto.
rmlgv