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Campesinos de la comunidad Tinaja de Vargas, del municipio de Tanhuato, Michoacán, denunciaron ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) agresiones y abusos de fuerzas federales y del estado durante operativos en esa zona límitrofe con Jalisco.
Los habitantes acusaron que desde el jueves pasado más de 60 camionetas de la Guardia Nacional sitiaron la localidad donde habitan más de 600 familias, cometiendo robos y abusos contra los pobladores del lugar, incluyendo agresiones a quienes se oponen a los cateos en sus casas o pretenden salir a trabajar en sus actividades en el campo.
Según denuncias de los afectados, los guardias nacionales y soldados tomaron como base de operaciones la escuela primaria del lugar e impiden que acerque la gente que se inconformó por la paralización de las clases y la presencia de las tropas en ese lugar donde asisten al menos 150 niños.
Los pobladores aseguran que las agresiones cometidas por los elementos de las fuerzas de seguridad federales, cobraron ya una víctima de herida de bala, cuando el joven José Alfredo Avalos Trujillo, de 19 años de edad, se dirigía en compañía de dos campesinos más a una zona de magueyes para realizar actividades agrícolas, pero fueron interceptados por un convoy de uniformados y hombres de negro que los bajaron a golpes del vehículo, en el momento en que otro grupo de otras personas era perseguido por los uniformados a los que reclamaron sus abusos y agresiones.
Ante representantes de la Segunda Visitaduría General de la CNDH, el joven afectado denunció que mientras los habitantes del lugar se defendían aventando piedras y otros objetos a los elementos que lo perseguían, varios de los oficiales comenzaron a disparar al aire, e incluso de forma directa a la gente, siendo que Avalos Trujillo, recibiera un impacto en la clavícula izquierda que aún este sábado por la noche no se le podía extraer de su cuerpo.
Según el joven, los elementos de las fuerzas de seguridad incluso usaron bombas de gas para dispersar a la gente que se retiró al temer que pudieran repetirse hechos como los ocurridos en 2015 cuando elementos de la extinta Policía Federal efectuaron un operativo similar en el rancho El Sol, situado en el mismo municipio de Tanhuato, donde fueron asesinados 42 pobladores del lugar y que motivó una de las recomendaciones más importantes de la CNDH por abusos de fuerzas federales.
En entrevista, habitantes del lugar, entre ellos José Alfredo Ávalos Trujillo, denunciaron que los integrantes de la Guardia Nacional y del Ejército asumieron una actitud de beligerancia ante los pobladores, que en un primer momento intentaron hablar con quienes se encuentran a cargo del operativo en ese lugar. En todo momento, dijeron, nos insultan y gritan, o bien hacen disparos al aire o en lugares cercanos a la gente para asustarnos y por ello la gente permanece dentro de sus viviendas.
A nombre de los habitantes de su comunidad, Ávalos Trujillo y sus compañeros, Alberto Rodríguez Mendoza y José Juan Vera García, pidieron al gobierno, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, su intervención para que cese el hostigamiento contra la comunidad que se inició desde el jueves pasado, principalmente las detenciones arbitrarias y permitan que los lesionados sean atendidos por personal médico, ya que muchos de los pobladores del lugar recibieron golpes severos sin que hasta el momento puedan ser atendidos debidamente.