La lección que ha dejado la pandemia por Covid-19 es que la ciencia funciona, pero no así la solidaridad y el sentido de justicia internacionales, aseguró el secretario de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard.
Al participar en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre El Mantenimiento de la paz y seguridad internacionales: Defensa del multilateralismo y el sistema internacional centrado en las Naciones Unidas, Ebrard Casaubon subrayó que la pandemia ha puesto al descubierto diversos flancos vulnerables de las organizaciones multilaterales.
“Retos globales como los desastres naturales, el cambio climático, las migraciones, implican sufrimiento para muchas personas y, desde luego, las pandemias, como la que vivimos, están y pueden llegar a afectar la paz, la seguridad, así como la estabilidad de los Estados y de la comunidad internacional en su conjunto. Hay que asumir la lección de esta pandemia: funcionó la ciencia, pero no así la solidaridad o el sentido de justicia internacionales”, expresó.
El canciller defendió al multilateralismo como la forma de hacer frente a los retos que enfrenta el mundo en todos los ámbitos. La ONU y en particular su Consejo de Seguridad, subrayó, deben abrirse más: escuchar las necesidades y las aspiraciones de los pueblos, y poner en los hechos a las personas en el centro de sus acciones y decisiones.
“México defiende el multilateralismo, tanto por principio como porque nuestro interés nacional es el de contribuir a generar la gobernanza global robusta y eficaz que se requiere para administrar los bienes globales, los que nos son comunes, que sirva a todos los países por igual, independientemente de su nivel económico o de su poder político. La paz duradera, necesaria para el desarrollo sostenible, sólo puede ser construida a través del entendimiento mutuo, la cooperación y la solidaridad”.
El seno del Consejo de Seguridad, mencionó, es el foro para abrir canales de diálogo, donde se incluya a todas las partes, sobre todo cuando se habla de resolución de crisis y conflictos.
Criticó la tardanza que tuvo el Consejo de Seguridad en emitir una primera resolución referente a la pandemia por Covid-19.
“El Consejo de Seguridad tiene una responsabilidad especial, no sólo por el mandato que le confiere la carta, sino también por las expectativas que genera. Por lo tanto, pensamos que debe ser más activo en la promoción del cumplimiento de sus decisiones, siempre en el marco del derecho internacional, el derecho humanitario y el derecho internacional de los derechos humanos”, apuntó.
Ebrard abogó por una reforma integral del Consejo de Seguridad, a fin de hacerlo más transparente y, sobre todo, más democrático y que rinda mejores cuentas y actualice sus métodos de trabajo.
“Mientras llega dicha reforma, que evidentemente no es sencilla, hay acciones a valorar para que el consejo sea más transparente. México ha propuesto; por ejemplo, discutir las cartas en las que se invoca el derecho a la legítima defensa, a la luz del artículo 51 de la Carta de la ONU y sobre las que el consejo parece no ejercer acción, aun tratándose de cuestiones de mayor gravedad, al involucrar el uso de la fuerza”, señaló.
Aprovechó para hacer un llamado a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad a sumarse a la iniciativa franco-mexicana sobre la restricción voluntaria del veto en casos de atrocidades en masa: “Resulta inadmisible que la protección de civiles, la lucha contra la impunidad y la prestación de asistencia humanitaria sean rehenes de las diferencias políticas que, en algunos casos, llevan a la inacción de este consejo”.