Federaciones, asociaciones y colegios médicos solicitaron al gobierno federal que se tome en cuenta al personal de salud para ser vacunado con la dosis de refuerzo contra el Covid-19.
Este grupo de población fue el primero en recibir la vacuna Pfizer a partir del 24 de diciembre de 2020, por lo que exigen al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador que sean considerados en la campaña de vacunación de terceras dosis.
“Continuaremos atendiendo Covid-19 y pacientes no Covid, solamente insistimos en que seamos tomados en cuenta. Recomendaciones internacionales señalan que después de seis meses de ser vacunados es posible recibir una tercera dosis para mantener la protección, es lo que pedimos”, indica la carta firmada por 30 federaciones, asociaciones y colegios de médicos que hicieron llegar al Presidente.
Al respecto, Andreu Comas, virólogo investigador de la Universidad de San Luis, consideró legítima la petición de los profesionales de la salud y aseguró que, en caso de no ser tomados en cuenta, se estaría cometiendo una negligencia.
“Es necesario que el personal de salud reciba una dosis de refuerzo, fueron los primeros en ser vacunados, ya pasaron más de seis meses y la evidencia científica indica que después de este tiempo la protección disminuye, son personas que están en alto riesgo y si el gobierno no los incluye en la vacuna de refuerzo, se puede hablar de negligencia”, dijo a EL UNIVERSAL.
Hasta el 25 de octubre, México acumuló 283 mil 122 casos de Covid-19 en personal de salud, de los que mil 236 permanecían activos, así como 4 mil 517 defunciones, siendo la Ciudad de México la entidad federativa con más profesionales de la salud.
De acuerdo con el Informe Covid-19 México, personal de salud, publicado por la Secretaría de Salud (Ssa), hasta la semana epidemiológica número 43 había 38 mil 269 casos sospechosos acumulados y 531 mil 609 negativos en trabajadores del sector salud.
De los mil 236 casos activos, la Ciudad de México es el estado con mayor actividad epidémica en este grupo poblacional, con 145; seguida por Baja California, con 113, y Guanajuato, 95.
Entre los 283 mil profesionales de la salud que contrajeron el virus desde el inicio de la pandemia, 38.9% corresponden a personal de enfermería, 32% a otros trabajadores de la salud (administrativos), 25.3% a médicos, 2% a laboratoristas y 1.8% a dentistas.
En tanto, en las 4 mil 517 defunciones confirmadas, 45% corresponden a médicos, 31% a otros trabajadores de la salud, 19% a enfermeras, 3% a dentistas y 2% a laboratoristas.
El mayor número de contagios de Covid-19 entre trabajadores de la salud ocurrió en la primera semana epidemiológica de 2021, cuando el país transitaba por la segunda ola, entonces se reportaron 8 mil 760 casos; le siguió la semana 2, con 7 mil 648 contagios, y la 3, con 6 mil 62.
En ese sentido, Mauricio Rodríguez Álvarez, profesor de la Facultad de Medicina y vocero de la Comisión de la UNAM para el Covid-19, reiteró que es necesario que el gobierno considere al personal de salud como grupo prioritario para recibir la vacuna, pero recalcó que es necesario que se considere a todos los profesionales de la salud, sin importar en donde desempeñen su labor, incluyendo a médicos de primer contacto y de barrio, que atienden en consultorios adyacentes a farmacia o que van directamente a los hogares.
“Este es un llamado enérgico a voltear a ver al personal de salud, para que se hagan todas las acciones para que se vacune de forma prioritaria con su dosis de refuerzo al personal de salud de todo el país. Insistimos que personal de salud son todos los que a veces no vemos, aquellos que van a una casa a cuidar a un enfermo, eso es personal de salud, los químicos de los laboratorios, es personal de salud, en el contexto de la pandemia por Covid ese personal es fundamental, los médicos que atienden consultorios adyacentes a farmacia, los médicos de barrio, todos sin distinción deben ser considerados para las dosis de refuerzo”, dijo.
Agregó que la aplicación de una tercera dosis en personal de primer contacto y de diferentes especialidades es necesario para evitar que de nuevo toda la atención se centre en Covid-19 y la atención de otros padecimientos que fue desplazada en el momento más álgido de la pandemia ocurra otra vez.
“Está documentado lo que desplazó la pandemia en cuanto a atención médica de otras afecciones, para contrarrestar eso necesitamos que se restablezcan los servicios de salud y, en una condición epidémica fuerte, que todos sigan trabajando para que no vuelva a rezagarse la atención, entonces necesitas que el personal de salud mental esté vacunado, el de enfermería, etcétera, que todos estén inoculados para que no se tengan que ausentar por enfermedad”, aseveró.