Durante su intervención en el inicio de actividades de la Comisión para el esclarecimiento de las violaciones a derechos humanos en la llamada guerra sucia, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval González , fue increpado por familiares de personas desaparecidas que estuvieron como invitados en el evento celebrado en el Campo Militar 1-A.
En la explanada de la Brigada de Fusileros Paracaidistas, un grupo de personas lanzaron consignas mientras el general Sandoval González ofrecía su mensaje.
"¿Dónde están los desaparecidos y los culpables?", soltó uno de los asistentes cuando el general afirmaba que "las Fuerzas Armadas han permanecido subordinadas al poder civil, tal como lo establece la Ley Orgánica", y que el mando supremo del Ejército y Fuerza Aérea corresponde al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Posteriormente, el grupo de personas levantó diversas pancartas en las que exigían que hablaran los militares y que este proceso no fuera una simulación.
"¡Queremos justicia para ellos!", exclamaron.
En su discurso, el titular de la Sedena aseguró que desde su creación, el Ejército y la Fuerza Aérea han mostrado se lealtad institucional y su compromiso inquebrantables en el desarrollo de todas sus tareas.
"Las Fuerzas Armadas reafirmamos el compromiso que tenemos de contribuir a esclarecer la verdad sobre los hechos que marcaron un hito en un sector de la sociedad de nuestro país”, declaró.
Dijo que para atender situaciones, como la ocurrida en 1968, el Estado mexicano adoptó medidas en regiones del país que buscaron garantizar la seguridad, el orden constitucional y el restablecimiento del Estado de Derecho.
El general Sandoval admitió que determinadas acciones implicaron que un "sector de la sociedad se viera afectado por sucesos que se alejaron de los principios de legalidad y humanidad, valores que nunca pueden estar separados de la vida institucional del país".
Afirmó que el Ejército se suma a los esfuerzos del presidente López Obrador para esclarecer los hechos pasados, dignificar a las víctimas y garantizar el derecho a la memoria histórica.
ed