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La salida de Carlos Romero Deschamps del sindicato petrolero dividió opiniones entre políticos, especialistas y líderes sindicales, quienes ven el mensaje de que “no hay intocables”, pero exigieron claridad al gobierno federal sobre la renuncia y que se persiga la corrupción a todos los niveles.
Ayer, el líder sindical presentó su renuncia al cargo que mantuvo durante 26 años, en medio de las investigaciones que la Fiscalía General de la República (FGR) tiene abiertas en su contra por un comportamiento anormal en sus ingresos.
La bancada de Morena en la Cámara de Diputados pidió indagar a fondo la riqueza de Romero Deschamps, otrora líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), y aplicar en su caso la ley de extinción de dominio para recuperar recursos de la nación que en su caso se apropió.
El presidente de la Comisión de Energía en San Lázaro, Manuel Rodríguez González, de Morena, dijo que sin que los legisladores se conviertan en jueces, la exigencia que ha permeado es que Romero Deschamps rinda cuentas.
La fracción del PRD vio detrás de la renuncia del exlíder petrolero Romero Deschamps, no un movimiento de democracia sindical, sino la mano del gobierno para intervenir en la vida de un gremio y lograr la dimisión, a cambio de impunidad.
No se perfila democracia ni un nuevo sindicalismo, sino que en lugar de Romero Deschamps pondrán a un obediente a la dirección de Pemex, y al presidente Andrés Manuel López Obrador, advirtió Antonio Ortega, vicecoordinador de los legisladores del PRD.
El politólogo José Fernández Santillán, catedrático del ITESM y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco, y miembro nivel 3 del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) consideró que “este es un nuevo quinazo al estilo del que dio [Carlos] Salinas de Gortari” a Joaquín Hernández Galicia La Quina, puesto que no se puede dar la salida de ningún líder sindical tan fuerte sin la anuencia del Mandatario federal.
Dirigentes sindicales de diferentes centrales obreras aseguraron que tras la renuncia del líder petrolero, no ven una persecución o embestida contra el sindicalismo por parte del gobierno de López Obrador.
El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, dijo: “No me parece extraña la renuncia de Romero Deschamps al sindicato de Pemex, ya que es normal y hasta natural que sucedan este tipo de cosas cuando hay una transición política como la que está viviendo México”.
Afirmó que en Morena “no vamos a hacer leña del árbol caído”, por lo que sí hay alguna responsabilidad a la que él se deba de someter, debe hacerse cuidando en todo momento la presunción de inocencia y el debido proceso.
