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El político y académico José Woldenberg participó en la presentación del libro “Historia de la pluralidad en EL UNIVERSAL . La construcción de la democracia en México . Los candidatos presidenciales de oposición en 1988”, en donde a través del prólogo da a conocer la historia de los editoriales del periódico.
A continuación el discurso íntegro de José Woldenberg, quien destaca sucesos y hechos importantes durante la contienda electoral.
Gracias, muy buenas tardes a todos, creo que en efecto, bueno señores y señoras del presidium, quienes nos ven a la distancia o en el recinto del Senado.
Creo que en efecto, la iniciativa de EL UNIVERSAL y del Senado de la República de recoger en un libro las aportaciones de cuatro destacados mexicanos en los años 1987 88 es una iniciativa digna.
Lo que voy a hacer es leer algunos párrafos del prólogo que se me pidió para este libro, invitándolos a visitarlo, dice:
"Cuatro editorialistas de EL UNIVERSAL fueron candidatos a la presidencia de la República en 1988 , colaboradores periódicos que ponían sus análisis de la situación nacional, subrayaban los temas fundamentales de sus respectivas agendas, denunciaban excesos de agresiones del gobierno y por supuesto en su momento explicaron el significado y la plataforma política de sus postulaciones.
Luego de varias décadas, esas voces no solo resultan elocuentes sino expresivas de las preocupaciones de aquellos momentos e ilustran la variedad de sensibilidades e ideologías que modelaban la esfera pública de nuestro país.
Son un mural de las coordenadas políticas que ordenaban el debate y sus coincidencias y contradicciones ilustran la complejidad de una democracia que no acababa de abrirse paso frente a una pirámide autoritaria que había resistido varios embates.
Creo que vale la pena ofrecer un poco del contexto político para entender de una mejor manera los textos y la intencionalidad de los mismos.
Se sabe, durante varias décadas, el formato de nuestra vida política estuvo modelado por un partido hegemónico PDR , PRM , PRI .
Bajo su manto se dirimían lo fundamental de la política y a sus flancos el resto de los partidos tenían más bien un carácter testimonial si se quiere germinar. No obstante una conflictividad social y política a la alza empezó a poner límites a esa hegemonía y a reclamar espacios para su expresión y contienda.
Suele fecharse esa erupción en 1968, cuando un movimiento estudiantil masivo y pacifico, obtuvo por respuesta una represión paranoica. Por supuesto no era la primera manifestación de descontento pero se convirtió en emblemática y en anunciadora de lo que estaba por venir. Los primeros años setenta, fueron los de una agenda aguda conflictividad en diferentes espacios universitarios, sindicales, agrarios, populares e incluso emergieron agrupaciones armadas. Era para quien quisiera verlo, la revelación de un México plural que no cabía ni deseaba hacerlo bajo los estrechos límites del oficialismo.
Un país modernizado, complejo, diferenciado que buscaba canales para su expresión que empezó a modificar las coordenadas de la política y sin embargo, pese a esa ebullición, México fue en 1976 a unas elecciones federales en las que hubo un solo candidato registrado para ocupar la presidencia de la República.
El PAN, la oposición tradicional, en esa ocasión no postuló a alguien porque en su convención, ninguno de los precandidatos logró las selecciones necesarias según sus estatus, mientras el Partido Comunista Mexicano, sin reconocimiento oficial lanzó la candidatura de Valentín Campa, un legendario sindicalista , en una forma de plantear "Somos una fuerza política legítima y deseamos ser reconocidos como tal para poder competir en las elecciones".
Ese desfase entre el México convulsionado por múltiples movilizaciones sociales y políticas y un mundo institucional, fue la cicatee para que desde el gobierno de José López Portillo se realizara una reforma política que intentó tener puentes entre la estructura constitucional y la política real.
Desde la Secretaría de Gobernación encabezada por Jesús Reyes Heroles se diseñó un marco normativo que abrió la puerta para el registro de nuevos partidos y dejó con cierto pluralismo a la Cámara de Diputados .
Las elecciones de 1979, además de los partidos tradicionales, PRI, PAN, PPS, pudieron participar el Partido Comunista , el Partido de los Trabajadores , y el Demócrata Mexicano . Tres años después el Partido Revolucionario de los Trabajadores y el Social Demócrata , y tres años después el Partido Mexicano de los Trabajadores .
Y aunque ni la legislación ni las instituciones ni los operadores políticos ofrecían garantías de imparcialidad a los contendientes, lo cierto es que la intención de pluralidad a la vida política nacional reavivó la expectativas, demandas y luchas a favor de la democratización del país.
Pues bien, los cuatro personajes que escribían en EL UNIVERSAL , son voces más que significativas y cada una desde su partido planteaban un as de reivindicaciones que parecían confluir en un objetivo, o México construía un hogar donde su diversidad política pudiera convivir y competir en términos civilizados o el refuerzo del autoritarismo no haría más que alimentar un espiral de desencuentros más que costosos para la estabilidad y la armonía nacionales.
El PAN , sin duda era el partido de oposición con la mayor tradición y arraigo en México y el postuló a la presidencia de la República a Manuel Clouthier .
Al leer sus textos uno se da cuenta de que son páginas militantes, tratan de explicar sus decisiones políticas, los dilemas que cruzan al país y las eventuales salidas que vislumbran.
A la distancia pueden también leerse como un testimonio vívido de los esfuerzos por edificar un régimen democrático para lo cual lo primero era la organización y lograr que los votos se contaran bien.
El Partido Mexicano Socialista de reciente creación, porque se había creado en 1987, era la desembocadura de un proceso de unidad de la izquierda y postuló al ingeniero Heberto Castillo.
Sus textos, línea editorial Heberto Castillo , de ahí emergen textos políticos para orientar y revelar el sentido de sus esfuerzos, están cargados de una pedagogía para la acción, son reflexiones marcadas por diversas coyunturas, iniciativas impuestas por una realidad cambiante , brújulas para no perder el rumbo ahí en donde nunca existe una sola ruta. Revelan con claridad las apuestas expectativas de una franja significativa de la izquierda en un periodo acotado pero significativo y visto retrospectiva relevante.
El Partido Demócrata Mexicano que había logrado su registro en 1979 para participar en las elecciones de 1979, postuló para la presidencia de la República a quien había sido durante dos periodos el presidente de ese partido, Gumercindo Magaña .
Se trata de la voz de un partido y una nueva corriente con un cierto arraigo con sobre todo en el centro del país que debe según Magaña, formar parte de la representación nacional, una voz que tiene historia y tradición y a la que le cuesta trabajo sintonizarse a los nuevos tiempos.
Gurmensindo Magaña lo expresa con claridad, expone sus argumentos y razones pero en aquel momento no logró conectar con los votantes, revisar sus textos a la distancia, sin embargo tiene sentido porque formaban parte del abigarrado mosaico de posiciones políticas que modelaban al país.
El Partido Revolucionario de los Trabajadores que había obtenido su registro para participar por primera vez en 1982, postuló por segunda ocasión como candidata a presidenta de la República a Rosario Ibarra .
Los textos de Rosario Ibarra son elocuentes, jamás deja de insistir en sus causas y reclamos , si una campaña presidencial testimonial y da cuenta de en las páginas del periódico. Cada artículo tiene una clara intencionalidad política, crea y argumenta a favor de la movilización y expone sus argumentos con fuerza y claridad. La fusión de sus esfuerzos con la de los militantes del PRD, sin embargo no resultaron suficientes para refrendar el registro del partido.
En suma, las páginas a las que debe de acercarse el lector son los testimonios de primera mano de cuatro importantes políticos mexicanos que en su momento fueron las as visibles de corrientes políticas ideológicas, muy distintas inserción social pero sin dudas de una época de unos safanes.
Y en su momento, y esto vale la pena subrayarlo, fueron recogidas y proyectadas por EL UNIVERSAL.
Muchas gracias."
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mhm/lsm
