La Cámara de Diputados definió las reglas y el formato con las que el pleno desahogará la discusión y, en su caso, la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación 2020.
Se prevé que el próximo jueves 14 de noviembre haya una sesión larga por el número de intervenciones y por las inconformidades que generarán las partidas asignadas a distintos rubros.
El pleno de San Lázaro avaló este acuerdo, el cual describe que una vez que la Mesa Directiva reciba el dictamen por parte de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, lo publicará en la Gaceta Parlamentaria, para que se difunda a los diputados.
La discusión en lo general se realizará conforme a lo siguiente: el presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Alfonso Ramírez Cuéllar, o uno de sus integrantes, expondrá los fundamentos del dictamen hasta por 10 minutos, desde la tribuna del Congreso.
Hará uso de la palabra hasta por 10 minutos un orador por cada bancada política, en orden creciente.
Para hablar en contra o a favor del dictamen, se abrirá una ronda de intervenciones de hasta seis oradores en cada sentido, quienes hablarán hasta por cinco minutos.
Al finalizar la ronda, después de leer la lista de oradores inscritos en ambos sentidos, la presidenta del recinto, Laura Rojas, preguntará si el asunto está suficientemente discutido. Si la respuesta es negativa, se abrirá una nueva ronda de hasta tres oradores en cada sentido, conforme con el artículo 104 del Reglamento de la Cámara Baja.
Al término de la discusión se llevará a cabo la votación del dictamen en lo general. En caso de que sea aprobado por mayoría de los votos de los diputados presentes, se procederá a la discusión en lo particular de los artículos y anexos reservados.
Para que se apruebe este dictamen solamente se requiere del aval de la mitad más uno de los diputados presentes, puesto que no es una reforma constitucional que necesita de la mayoría calificada, es decir, de las dos terceras partes de los legisladores.