tiene diez riesgos en su construcción
y operación con más de 60% de probabilidades de ocurrir y que tendrían un impacto severo en forma de sobrecostos o retrasos. Los retrasos van de uno a diez meses y los sobrecostos podrían llegar al 20% del proyecto.
Estos más que probables problemas son: falta de coordinación en la gerencia, retrasos en la o btención de los permisos y aprobaciones sociales, retrasos en los permisos ambientales, no poder liberar el derecho de vía, ofertas temerarias de las empresas en las licitaciones , estimaciones incorrectas en los tiempos de licitación y contratación, gestión deficiente de los contratos públicos , riesgos de interfase, riesgos geológicos y estimaciones erróneas de demanda.
Lee el resumen: Los papeles ocultos del Tren Maya: Fonatur ocultó información crítica con el mega proyecto estrella de AMLO
Lee parte 1: Fonatur eliminó críticas al Tren Maya en el informe que aprobó Hacienda
Lee parte 2: La sombra del NAIM persigue al Tren Maya
Lee parte 3: Un Tren Maya para los fifis
Lee parte 5: Los imposibles y forzados plazos políticos del Tren Maya
Lee parte 6: La respuesta de Fonatur
Esta matriz de riesgos para cada uno de los siete tramos fue realizada por PWC junto con el bufete Woodhouse Lorente Ludlow, los técnicos de Mextypsa, Fonatur, la consultora Inerco y ProIntec de Grupo Indra. En un taller celebrado el 16 de octubre de 2019, el grupo los analizó y realizó una serie de comentarios que quedaron plasmados en un reporte de 22 páginas.
Gerencia del proyecto se refiere a que no existan controles adecuados que aseguren una coordinación adecuada por parte de las autoridades y los contratistas. Si ocurriera, implicaría un sobreplazo probable de nueve meses con un s obrecosto del 20%. En las aprobaciones sociales, se calculó que el retraso sería de 10 meses, y, en las ambientales, la probabilidad cambia según el tramo, subiendo en los que atraviesan reservas y ecosistemas protegidos . Su retraso sería de entre cuatro y cinco meses.
Esta es la respuesta de Fonatur a EL UNIVERSAL: https://www.eluniversal.com.mx/interactivos/2021/pdf/tren-maya/preguntas_universal_junio.pdf
Lo mismo pasa con la liberación de derecho de vía, que se le da una probabilidad del 20% en todos los tramos, salvo en el Selva 2 , que es del 100%. Este tramo es uno de los que construirán los militares y sobre el que Fonatur ocultó información crítica a la Secretaría de Hacienda. El escenario más probable es que genere un retraso de nueve meses.
Los riesgos de ofertas temerarias, el de gestión deficiente de contratos públicos y el de estimaciones incorrectas de los tiempos de licitación y contratación implicarían retrasos más probables de entre dos meses y tres meses. Los riesgos de interfase, definidos como la aparición de incompatibilidades entre los diferentes componentes del proyecto o las disputas entre contratistas tienen una probabilidad del 75% e implicarían unos sobrecostos del 10%.
Los riesgos geológicos en los tramos que recorren los estados de Yucatán, Quintana Roo y sureste de Campeche tienen una probabilidad de ocurrencia del 75%, con un retraso probable de seis meses. Finalmente, el riesgo de que la demanda sea menor de la proyectada es del 90% en todos los tramos.