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En el accidente en el que murieron la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, y el senador Rafael Moreno Valle no hubo explosivos ajenos al propio combustible del helicóptero, determinaron peritos en materia de incendios y explosivos de la Secretaría de Marina (Semar) que coadyuvan en las investigaciones del caso.

“La Secretaría de Marina ha informado a la mesa de trabajo que sus peritos en materia de incendios y explosivos, después de un análisis exhaustivo y cuidadoso de los restos no encontraron explosivos o sustancias ajenas al combustible que hayan estallado dentro de la aeronave accidentada”, dijo ayer el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, quien participó en dos conferencias de prensa realizadas por la dependencia para informar los avances del caso.

Los marinos utilizaron binomios caninos que laboraron en el lugar en busca de algún artefacto explosivo, además del trabajo de campo que realizaron los peritos.

El subsecretario de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Carlos Alfonso Morán Moguel, explicó que ha sido recuperada la unidad de adquisición de datos de vuelo, misma que será enviada a Canadá para ser analizada por peritos en la materia.

“Es una unidad que graba segundo a segundo parámetros de las revoluciones del motor, de la temperatura y de los anuncios de emergencia y la posición del aeronave en vuelo. Esta unidad va a ser enviada, ahorita está resguardada por la comisión investigadora y será enviada para su lectura a las autoridades de la aviación civil de Canadá”, dijo.

Aunque ayer, los funcionarios federales afirmaron que solicitarían al Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos que envíe peritos para que coadyuven en las investigaciones de lo ocurrido el pasado 24 de diciembre, Morán Moguel precisó que dicha organización informó que por el momento no podrá colaborar con México, debido al conflicto interno entre el Senado y la presidencia de Donald Trump por la construcción del muro fronterizo.

En consecuencia, México solicitará a peritos canadienses y de la Unión Europea que se sumen a las indagatorias del caso, tomando en consideración que el fabricante del helicóptero Augusta 109 es de Canadá y el motor es de Italia.

El subprocurador de Control Regional, Procedimientos y Amparo de la Procuraduría General de la República (PGR), Roberto Ochoa, comentó que se solicitará ayuda a agencias de investigación estadounidenses tales como el FBI.

Explicó que, además de la investigación que realiza la delegación de PGR en Puebla, la fiscalía local abrió una carpeta y que ambas instituciones trabajan en coordinación para conocer la verdad de lo ocurrido.

“Se privilegió anoche la localización, hallazgo, cuidado y traslado de los cuerpos que se encontraban en el lugar”, dijo.

Para las diligencias el gobierno federal conformó un equipo de investigación técnica encabezado por Morán Moguel, Rodrigo Vasquez Colmenares, director General de Aeronáutica Civil, y el subprocurador Roberto Ochoa.

Además, en ese equipo ya colaboran representantes de los fabricantes de la aeronave y del motor de la misma.

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