Más Información
nacion@eluniversal.com.mx
Pachuca, Hgo.— Al cumplir la primera mitad de su sexenio, el gobernador Omar Fayad Meneses destaca la disminución de la pobreza como su principal logro, al indicar que 167 mil hidalguenses dejaron esa condición en los últimos tres años.
En entrevista con EL UNIVERSAL, resalta también la ampliación en la cobertura educativa, la inversión extranjera —de 53 mil millones de pesos—, el abasto de más de 90% de medicamentos en hospitales, el manejo responsable de la deuda y la construcción del Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Calidad e Inteligencia (C5i) para combatir la inseguridad.
“El balance dentro de lo que planteamos y cómo recibimos el estado, al día de hoy, [es de] gran avance, digamos que es positivo, que en Hidalgo vamos por el camino correcto”, considera.
Aconseja que ante la nueva realidad política del país, los gobernadores del PRI deben transitar de la misma forma que lo hicieron con los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, y ayudar al Presidente de la República.
Afirma que nunca le echará la culpa al gobierno federal de lo que sucede en Hidalgo. Aunque los temas sean de competencia federal, se tratará de coordinar, dice.
El gobernador, quien el pasado jueves presentó su Tercer Informe de Gobierno, asegura que su prioridad es entregar buenas cuentas a los hidalguenses y no pensar en su futuro: “No soy de los que sudan calenturas futuras, no me veo en ningún cargo público si no entrego buenas cuentas en Hidalgo”, asevera.
¿Cómo llega a la mitad de su administración al frente de Hidalgo?
—Tenemos cosas muy importantes. La primera de ellas es que fuimos el segundo mejor esfuerzo nacional en el combate a la pobreza, por los programas alimentarios, los comedores comunitarios, haber introducido agua, luz y drenaje, el mejoramiento de vivienda y becas para la educación.
Hay una estrategia del gobierno del estado, una política pública de disminuir la pobreza y afortunadamente llego a la mitad de mi administración habiendo logrado el objetivo de disminuir la pobreza casi en siete puntos, me parece que no es cualquier cosa que 167 mil hidalguenses hayan dejado esa condición.
¿Cómo van en otros rubros?
—En la estrategia financiera y el adecuado manejo de los recursos públicos, de las finanzas y de la deuda estamos con la mejor calificación en México, somos Triple AAA estable por primera vez en la historia de Hidalgo.
Somos el único estado que hoy goza de esa calificación. Quizá uno de los mayores logros que también puedo referir es la atracción de inversión extranjera, llevamos al día de hoy 53 mil millones de pesos y para fin de año vamos a llegar a 60 mil millones, lo que significa el doble de lo que hizo la administración anterior en seis años. Lo logramos en los primeros tres años.
¿Y en salud y educación?
—En materia de salud pública hemos triplicado el abasto de medicamentos, llegué con 30% de abasto en clínicas y hospitales; hoy estamos a más de 90%. Hay mejor cobertura, llevamos telemedicina a zonas indígenas.
Hicimos el programa de becas Miguel Hidalgo que le estoy dando a los estudiantes politécnicos, tecnológicos, interculturales y de normales, 120 millones de pesos para que 14 mil 500 alumnos no se queden sin estudiar la universidad.
Hemos cambiado materiales, aulas tecnológicas y hemos tratado de enseñar de mejor manera para crecer en los indicadores, no sólo de control, sino de calidad. Aquí se dan los útiles escolares para especial, preescolar y primaria y para la secundaria útiles y uniformes.
¿En seguridad cómo ha empleado la tecnología para mejorar?
—Hemos implementado la integración tecnológica más sofisticada de México y de América Latina, tenemos el Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Calidad e Inteligencia [C5i]. Recibí Hidalgo con 60 cámaras de videovigilancia, hoy tenemos 6 mil 500 cámaras en sólo tres años.
Tenemos drones, un avión solar, renovamos todas las patrullas y un posicionador satelital, dimos nuevos uniformes que traen chips para que sepamos dónde se encuentran los oficiales y así podamos atender las emergencias y vigilar mejor.
¿La inversión en el C5i ha implicado que Hidalgo se mantenga entre los cinco estados más seguros?
—Mantener seguro el estado implica muchas cosas. Estamos dando alarmas vecinales, hemos colocado en postes botones de pánico, tenemos una de las mejores academias de formación de la policía, hacemos los exámenes de control y confianza. Tratamos de ir cumpliendo y ayudándonos con la federación.
Hidalgo nunca le echará la culpa a la federación de las cosas que suceden aquí. Aunque los temas sean delitos federales trato de coordinarme. Algo que me he propuesto desde que llegó el presidente [Andrés Manuel] López Obrador es hacer un modelo de coordinación de un gobierno estatal con el gobierno federal y los municipios sin importar los colores partidistas.
¿El modelo del C5i puede ser exportable a nivel nacional?
—A nivel nacional e internacional. Ya muchos estados se están acercando para que les muestre, para que les digamos qué hicimos, porque además vieron que nosotros nos podemos interconectar muy fácilmente con todos los estados.
¿Cuál es la situación más difícil que le ha tocado enfrentar?
—Varias. La tragedia más grande en la historia: en 150 años nunca habíamos tenido una tragedia como la de Tlahuelilpan, entre otras cosas.
¿Seguirá la coordinación con el gobierno federal?
—Yo trataré de ser modelo de coordinación nacional, mi única forma de ayudar a los hidalguenses es coordinándome bien con el Presidente de la República.
Yo no gobierno una isla del Pacífico, gobierno un estado que es parte de una federación que está dentro de una República y tiene un sistema federalista, presidencialista, yo respeto la institución y en lo personal respeto al Presidente de la República.
¿Cómo ayuda Hidalgo?
—Por ejemplo, yo pongo a disposición de la federación el avión solar que tenemos con una cámara muy poderosa para vigilar los ductos de Pemex, drones y a toda la Secretaría de Seguridad para que coadyuve con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana federal, con el Ejército y con las instituciones que trabajan en el combate al huachicoleo.
¿La pobreza es un factor para que algunas personas se dediquen al robo de combustible?
—Sí, es un factor porque el crimen organizado está utilizando la pobreza y la marginación de ciertos jóvenes para invitarlos a sus organizaciones delictivas. [Por eso] hay que darles oportunidades a los muchachos.
¿Cómo definiría la primera mitad de su gobierno?
—Calificarme a mí mismo sería vituperio, no debo hacerlo. Sólo diría que el balance dentro de lo que planteamos y cómo recibimos el estado al día de hoy [es que] hay un gran avance, digamos que el balance es positivo.
¿Cuáles son los pendientes?
—Pendientes hay muchos. En materia de seguridad todavía tenemos. En el combate al hambre traemos pendientes, [también] en el combate a la pobreza, pero estamos haciendo en cada uno el mejor esfuerzo. No podemos decir que todo en Hidalgo es perfecto.
¿Cómo le gustaría terminar su periodo de gobierno?
—Me gustaría cerrar mi administración dentro de tres años y que la gente diga que hice un buen esfuerzo, [que] puse todo de mi parte y que pueda caminar como lo he hecho toda mi vida: libremente y tranquilamente.
¿Cómo ha sido la relación de los gobernadores del PRI con el Presidente de la República?
—Yo sé que mis compañeros gobernadores me respetan, saben que tengo una magnífica relación con el Presidente y la han respetado todos, ninguno me ha hecho algún señalamiento negativo. Al contrario, mi consejo ha sido que esta es una nueva etapa del país, tenemos que transitar, como alguna vez los gobernadores del PRI transitaron con el régimen del PAN, tanto con [Vicente] Fox y con [Felipe] Calderón, pues ahora hay que ayudar al Presidente de la República y transitar en los términos de los programas de la República que él impulsa.
¿Cómo ve la nueva dirigencia nacional del PRI?
—Veo muy entusiasmado a Alejandro Moreno, veo que trae la preocupación de ayudar y tiene la idea de un diálogo abierto con el gobierno de la República, yo se lo aplaudí porque de esa manera vamos a poder transitar mejor.
¿Cómo califica al partido tricolor como oposición?
—Es un partido que tuvo un descalabro mayúsculo el año pasado, pero tuvimos uno en las elecciones de 2000, y aunque los agoreros de la desgracia piensen que cada vez que perdemos las elecciones va a desaparecer, ya vimos que no.
