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Naucalpan, Méx.— Los padres de los bebés, que por error, fueron intercambiados, regresaron al Hospital Maximiliano Ruiz Castañeda, para recibir los resultados de las pruebas de ADN que confirmaran la entrega correcta de sus hijos, pero no fueron atendidos.
Saúl y Wendy, una de las familias afectadas, junto con Fidel y su esposa Cristina, otra de las parejas perjudicadas, y Eva Castillejo, abuela de uno de los bebés, regresaron al hospital sin suerte alguna.
El 19 de noviembre, Fidel acudió por su bebé al citado hospital, puesto que su esposa se quedaría internada por complicaciones en el parto. Doña Eva ingresó a los cuneros con la pañalera con la que vistió de rosa al bebé que suponía era su nieta. Por la noche, la abuela le cambió el pañal a oscuras, “por lo que no me fijé que no era mi nieta, fue hasta por la mañana cuando vimos que era un niño (...). Fue una negligencia, por eso fuimos al Ministerio Público a denunciar el manejo irresponsable de recién nacidos”, explicó.
Al enterarse de que su recién nacido fue entregado a otra familia, Wendy relató: “Sentí horrible, es inexplicable que por un error se lleven a tu bebé”.
El bebé de Saúl y Wendy tenía una pulsera de identificación sin datos, la cual guardan junto a sus papeles médicos, “fue negligencia”, dijo Saúl.
Autoridades de la Secretaría de Salud mexiquense informaron a EL UNIVERSAL que los resultados de las pruebas de maternidad los recibieron el 27 de noviembre, y el resultado fue confirmado a ambas familias, ayer sólo les entregarían el documento que confirma la entrega correcta de los bebés.
