La Habana.— Un muerto, 121 heridos y 17 desaparecidos es el balance de la explosión de dos tanques de combustible en la ciudad de Matanzas, en el oeste de Cuba, donde seguía la zozobra por el fuego que no se extinguía.
Los bomberos y otros especialistas intentaban sofocar el incendio en la Base de Superpetroleros de Matanzas.
El gobierno dijo que pidió ayuda a expertos internacionales en “países amigos” con experiencia en el sector petrolero.
El vicecanciller Carlos Fernández de Cossío reportó que el gobierno de Estados Unidos había ofrecido ayuda técnica.
El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que elementos de Petróleos Mexicanos (Pemex), Defensa Nacional (Sedena) y Marina (Semar) viajan a la isla. El Mandatario detalló que los enviados son técnicos especialistas contra incendios.
El presidente Miguel Díaz-Canel agradeció los ofrecimientos de ayuda de México, Venezuela, Rusia, Nicaragua, Argentina y Chile. “La extinción del incendio aún puede tardar”, comentó Díaz-Canel. El director de Comercio y Suministro de la estatal Unión Cuba-Petróleo (Cupet), Asbel Leal, precisó que el país nunca había enfrentado un incendio de “la magnitud que tenemos hoy”.
Siete de los heridos fueron llevados al Hospital Calixto García de La Habana, el cual cuenta con una unidad de quemados.
El gobernador de Matanzas, Mario Sabines, precisó que más de mil personas fueron evacuadas y que continúan las operaciones para trasladar a aquellas que viven en lugares vulnerables.
“Al parecer se produjo un fallo en el sistema de pararrayos, que no pudo soportar la energía de la descarga eléctrica”, según Granma. Agencias, con información de Pedro Villa y Caña