Lerdo, Durango.- A poco más de un mes de que termine su sexenio, el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador agradeció a sus adversarios de que el proceso de transformación en México se ha llevado a cabo de manera pacífica y que no han pasado de insultos y mentadas.
Al encabezar la ceremonia de inauguración de la segunda etapa del programa Agua Saludable para la Laguna, López Obrador señaló que cuando uno tiene convicciones, principios e ideales, sabe que debe de pagar “ciertas cuotas de humillación”, las cuales, indicó, han valido la pena.
“Nos hemos visto como adversarios, no como enemigos. Y esto lo tengo yo que agradecer a mis adversarios, no han pasado de insultos, de mentadas, pero ya mi madre Manuelita ya tiene tiempo que está en el cielo.
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“Y cuando tiene convicciones, principios, ideales, sabe uno que luchar por una causa justa implica tener que pagar ciertas cuotas de humillación. Y por eso hemos aguantado, porque valió la pena iniciar esta transformación”, dijo.
Acompañado por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, y por los gobernadores priistas de Durango, Esteban Villegas; y de Coahuila, Manolo Jiménez, el Mandatario federal manifestó que no es fácil llevar a cabo una transformación “tan profunda, radical”.
“Porque estamos arrancando de raíz la corrupción, no es tan fácil acabar con privilegios, y lo hemos hecho de manera pacífica. Las otras tres transformaciones se hicieron con las armas: la Independencia, la Reforma y la Revolución; esta es una transformación pacífica gracias a todas y a todos”.
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