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La presidenta de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri Riancho , reconoció que será complicado realizar un periodo extraordinario de sesiones cuando la Ciudad de México se encuentra en semáforo naranja , ya que ello implicaría la asistencia de 500 legisladores.
“Hay muchísimos inconvenientes porque no sólo es una sesión de la Cámara de Diputados, sino además una sesión de Congreso General que está conformada por 628 legisladores, justo cuando la Ciudad de México entra a semáforo naranja; entonces, es un tanto contradictorio”, dijo previo a la sesión de la Comisión Permanente del Congreso donde se prevé analizar el tema.
En entrevista y cuestionada sobre la viabilidad de un periodo extraordinario para votar el desafuero de los diputados de Morena, Saúl Huerta; y del PT, Mauricio Toledo, así como la ratificación de nombramientos, entre otros, apuntó “Yo veo complicado por dos cosas”.
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“Una, porque insisto que la Cámara de Diputados no puede ponerse en situación de violar un amparo, lo reitero, lo vuelvo a señalar. Y segundo, el tema sanitario”.
La diputada del PRI indicó que “para nosotros, en el caso de cualquier ratificación de nombramiento, expresamente señala que tiene que reunirse el Pleno, 500 diputados y diputadas. Y esto tiene además ahora, la consideración de que si se establece que haya alguna reforma, como es el caso de la legislación, prorrogar la legislación en materia de subcontratación, tiene forzosamente que ser de las dos cámaras y tiene que haber una sesión de Congreso General con esos 628 legisladores”.
Sin embargo, dijo que el dictamen de la Primera Comisión que se va a poner a consideración del pleno de la Comisión Permanente y lo que al final de cuentas cuenta son los votos. “Se requiere una mayoría calificada”, concluyó.
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