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Ante el grave incremento de casos de cobro de “ derecho de piso ” en Quintana Roo, el Congreso de esa entidad solicitó al Senado de la República su apoyo para que exhorte a las fiscalía estatal a integrar de manera adecuada las carpetas de investigación y no las turne a la Fiscalía General de la República (FGR), que invariablemente las devuelve por ser la extorsión un delito del fuero local.
El diputado Gustavo Miranda, presidente de la Junta de Gobierno del Congreso quintanarroense, explicó que por corrupción o temor a los delincuentes, la fiscalía estatal abre carpetas y expedientes en los que considera al crimen organizado como presunto responsable de ese delito, cuando no está tipificado como del orden federal.
“Hay un gran número de carpetas que ya la Fiscalía General de la República le está regresando a la Fiscalía estatal diciendo: ‘es tu competencia’, pero en ese inter, muchos de los denunciantes retiran su denuncia o todo el proceso se llena de corruptelas y terminan estas gentes por quedar libres”, lamentó.
Dio a conocer que el Congreso de Quintana Roo ya presentó un exhorto a la fiscalía estatal y se hicieron modificaciones legales al delito de extorsión para aumentar las penas al máximo tanto a los delincuentes como a los policías y ministerios públicos involucrados.
Además, se concretó una reforma para que se indivualice la responsabilidad de la comisión del delito de extorisión o del cobro del “derecho de piso”, que el individuo que comete ese ilícito sea procesado, "porque cuando metemos a dos o tres o más, es una de las excusas para decir que se trata de un grupo del crimen organizado ".
El presidente del Congreso de Quintana Roo puntualizó que lo que ahora se busca es que el Senado impulse el que se “tropicalice” esta estrategia en los distintos estados de la República y hacer que la FGR defina un protocolo claro para que las fiscalías estatales integren bien las carpetas de investigación.
El diputado Miranda remarcó que en el caso de Quintana Roo, el cobro de “derecho de piso” es muy grave, pues de acuerdo con las cifras del Semáforo Delictivo Nacional, se incrementó un 26 por ciento en el último año, pero las cifras reales deben ser mayores porque son muy pocos los que se atreven a denunciar.
“Yo creo que hay que agarrar al toro por los cuernos y demostrar quien es la autoridad, porque en Quintana Roo hay un vacío de poder, y cuando eso sucede los que llenan ese vacío son los mañosos o malandros”, finalizó.
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