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La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que, debido a la sequía meteorológica por la que atraviesa el país desde hace algunos años y sumado a que desde el año pasado a causa de la pandemia por Covid-19, en algunas ciudades tuvieron que aumentar la distribución, en estos momentos hay una situación crítica por la falta del recurso en todo el país.
“El tema del Covid hizo que se entregara en algunas ciudades mucho más agua de la que ya se mandaba para atender las indicaciones del lavado continuo de manos con agua y jabón, y por ello también nos bajó el nivel de almacenamiento en las presas”, detalló en conferencia la directora General de la Conagua, Blanca Jiménez, quien hizo un llamado a la población y a los gobiernos a hacer un uso más razonado del líquido.
Muestra de ello, explicó, es que sólo en 2021 Conagua ha implementado diversas medidas y operativos de apoyo que incluyen la distribución, en entidades que lo han solicitado, de 38.9 millones de litros de agua potable mediante camiones cisterna para 112 mil 517 habitantes en situación de vulnerabilidad.
Jiménez Cisneros explicó que, a pesar de que el déficit de lluvias en 2020 fue de 3% respecto a la media, la pandemia por Covid-19 generó una demanda adicional de agua.
Informó que de acuerdo con las precipitaciones acumuladas, marzo de 2021 se ubicó en el lugar 71 de 81 registros para ese mes desde 1941, ubicándose las lluvias acumuladas en ese periodo 46.2% por debajo del promedio. Las regiones más afectadas por los efectos de la sequía en México son el noroeste y norte del país, así como Guanajuato, Michoacán, Guerrero y la costa norte de Oaxaca.
“Hemos observado que hay menos líquido y cada vez es mayor la demanda de la población, incluso en actividades en las que no se debe usar, como en limpiar patios con las mangueras”, dijo.
