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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que podría cumplir su amenaza de cerrar la frontera entre Estados Unidos y México “la próxima semana” y exigió una vez más al gobierno mexicano que frene las caravanas migrantes que llegan desde Centroamérica.
Dijo también que podría cerrar su frontera sur al comercio si México no impide que las caravanas de migrantes lleguen a su país.
“La mantendremos cerrada por mucho tiempo. No estoy jugando. México tiene que detenerla”, dijo Trump en una visita a Florida. Al preguntársele si cerraría la frontera mexicana a todo el comercio, dijo a periodistas: “Podría ser a todo el comercio”.
En los últimos días, el mandatario estadounidense ha recuperado el aviso de acción en la frontera, aprovechando los reportes de prensa que anuncian la formación de nuevas caravanas de migrantes centroamericanos. La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, indicó que se está formando una en Honduras que podría agregar hasta 20 mil integrantes, calificada como “la caravana madre”.
Enaltecido por su regreso al terreno electoral y el refuerzo de su presidencia tras la publicación del informe de la investigación de la trama rusa, Trump ha vuelto a usar a México como saco de sus golpes y política antinmigrante.
“Si México no frena inmediatamente TODA la inmigración ilegal que viene a EU a través de la frontera sur, voy a CERRAR la frontera o grandes secciones de la frontera la próxima semana”, advirtió a través de su cuenta de Twitter. La delimitación temporal podría augurar que esta vez su amenaza pueda cumplirse, tras haberla insinuado desde, al menos, octubre de 2018.
Trump mantuvo el duro discurso durante todo el día, y en cada ocasión que tenía contacto con la prensa ahondó en su plan, insistiendo en que México podría frena la inmigración centroamericana “muy fácil” pero que, en cambio, “sólo toma nuestro dinero y habla”.
“Han hecho mucha fortuna de Estados Unidos”, aseguró, apuntando falsamente que en los últimos años México ha tenido un superávit comercial de, “por lo menos, 100 mil millones de dólares”. Para Trump, cerrar la frontera, incluso a todo tipo de comercio, sería bueno porque generaría el descenso del tráfico de drogas.
“¡Cerrar la frontera sería una cosa buena!”, resumió. Según el mandatario, esa amenaza es la única acción posible, al menos hasta que esté finalizada la construcción de su prometido muro.
La idea de cerrar la frontera no es nueva. En el pasado había tuiteado más de media docena de veces al respecto, pero nunca había sido tan constante ni había impuesto plazo concreto.
Por primera vez, el presidente Andrés Manuel López Obrador le respondió, aunque sin entrar demasiado en la confrontación, e insistió en que quiere llevar una relación muy cordial con el vecino del norte.
“Trump tiene una visión que respeto y considero legítima, pero nosotros tenemos como estrategia (...) la creación de oportunidades de empleo y bienestar”, contestó el Presidente.
A través de redes sociales, el canciller Marcelo Ebrard se posicionó apuntando que buscarán “entendimiento” con la contraparte estadounidense.
