El municipio de Tehuacán, Puebla, celebró la Carrera de la Tortilla, que se realiza desde 1992 pero se vio interrumpida por la pandemia de Covid-19.
Con la práctica heredada de generación en generación, entre las mujeres de la junta auxiliar de Santa María Coapan, de elaborar este alimento de forma casera con nixtamal blanco y cal, la actividad une las tradiciones culinarias y la fe a la religión católica que a mediados de agosto celebra La Asunción de la Virgen María.
Desde 2017, la carrera fue declarada Patrimonio Cultural de Tehuacán. Es una celebración que ha motivado el interés de académicos y la Secretaría de Cultura federal, que han documentado sus características.
De acuerdo con la Secretaría de Cultura, el recorrido consta de cinco kilómetros, pero la principal característica no es la distancia, sino las tortillas que cargan las participantes y el uso de su vestimenta tradicional.
La madrugada antes de la carrera, las mujeres de Coapan elaboran a mano el pesaje de tortillas con el que participarán, según la categoría de edad y que puede ir de uno a seis kilos. Por ejemplo, las niñas de cuatro a seis años soportan un kilo y así conforme la edad avanza. Las de 19 a 39 años toleran seis o más kilos.
Asimismo, se alistan con su traje típico, conformado por camisa bordada, enagua, medio mandil, trenzas con listones, huaraches de piel o descalzas.