Las candidatas a ministra que serán votadas hoy por el pleno del Senado y, eventualmente, una resultará electa por dos terceras partes de los votos, comparecieron ayer ante la Comisión de Justicia. En su examen establecieron su independencia respecto a grupos, partidos y poderes.
Las aspirantes presentaron su perfil profesional y académico, así como elementos de su programa de trabajo, en caso de llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), para dar eficacia y transparencia al Poder Judicial. Matizaron la jornada con su visión femenina.
Diana Álvarez Maury, Ana Laura Magaloni Kerpel y Margarita Ríos- Farjat se presentaron a lo largo de unas tres horas cada una. Respondieron preguntas de senadores, en una jornada en la que Claudia Edith Anaya Mota (PRI) felicitó la inteligencia y el perfil vertical de las candidatas, y consideró la fecha como celebración del Día de la Mujer.
Los legisladores inquirieron a las candidatas sobre la agenda de temas públicos, como cannabis, aborto, derechos humanos, corrupción en el Poder Judicial, acceso a la justicia, amparo y otros más.
Coincidieron en que se requiere someter a las instituciones de justicia a debate.
Respecto al aborto, las tres candidatas a ministra expresaron solidaridad con las mujeres que van a prisión por interrumpir su embarazo, y se declararon en contra de que se penalice en leyes locales.
Álvarez Maury, cuyo último cargo es de subsecretaria de Gobernación en la actual administración, aseveró: “No tengo ni he tenido ningún vínculo de amistad o parentesco que pudiera afectar la independencia de mi función y decisión (...) Soy y siempre he sido una mujer profesional, independiente e imparcial”. Aseguró que no tiene intereses personales, partidistas o de grupo que pudieran influir en sus decisiones en la Corte.
“Quiero ser una ministra extramuros, que se esfuerce por usar todos los sentidos para ver, escuchar, palpar, visitar y apreciar la mejor visión multidimensional de los casos, que son problemas y vivencias, no son expedientes”, destacó.
En tanto, Ana Laura Magaloni Kerpel, especialista en Reforma Judicial, afirmó que México es el país de la ley del más fuerte, y señaló que se propone trabajar para abrir las puertas de la justicia a millones de desprotegidos.
“Vivimos en un país injusto, un México atravesado por la desigualdad, el privilegio, el conflicto y la incertidumbre, también azotado por la violencia y la corrupción”, indicó la candidata.
Al presentarse ante la Comisión de Justicia del Senado, señaló que “para una mujer como yo, que he dedicado mi vida a la justicia, este momento es el reconocimiento más alto al que habría podido aspirar”.
Lamentó que el país está partido y la justicia lleva demasiado tiempo torcida, “por ello, es que existe un amplio respaldo social a que el Estado recupere el espacio que han ocupado la violencia y la corrupción”.
El cambio social en México, consideró, requiere una reforma profunda al entramado institucional compuesto por cárceles, Ministerios Públicos, juzgados de primera instancia, defensorías, que “no están en condiciones de brindar protección y freno al atropello”.
Magaloni Kerpel dijo que se propone, desde la responsabilidad de ministra, “definir los límites al poder, que no es otra cosa que gestionar adecuadamente la atención inevitable entre Constitución y democracia”.
Por su parte, Margarita Ríos-Farjat, titular del Sistema de Administración Tributaria (SAT), defendió su autonomía e independencia con su currículum y sus orígenes.
Remarcó que en el último año ha reaccionado conforme a la ley a “presiones reales, lo que implica decir no a grandes capitales, que no van a ceder con un acto cívico; insistirán. A ello se responde con firmeza, con carácter.
“Siempre he sido una persona libre, y siempre lo seré”, afirmó. Un año de trabajo en el gobierno federal, dijo, no la cambia en nada.